mérida. La directora del Festival de Mérida, Blanca Portillo, afirmó ayer que la situación económica del certamen es "complicada" y que ahora es la Junta de Extremadura, como principal patrono, la que debe "ponerse manos a la obra" e investigar lo que está pasando. Así se lo trasladó ayer al jefe del ejecutivo regional, José Antonio Monago, con el que se reunió durante una hora y media acompañada de la codirectora del certamen, Chusa Martín. En el encuentro, según explicó Portillo, han conversado sobre la polémica surgida tras la retirada de una fotografía de la exposición Camerinos, sobre los problemas económicos del festival y las razones por las que ambas han decidido no continuar. "Se le ha explicado todo con pelos y señales", manifestó Portillo, que reiteró que el motivo para abandonar la dirección del Festival de Mérida no es sólo la retirada de una fotografía del actor Asier Etxeandía caracterizado de Jesucristo, sino "un problema de fondo mucho más grave que tiene que ver con la estructura del festival". "Así que ahora es la Junta quien tiene que ponerse a investigar qué es lo que está pasando y, sobre todo, para evitar que esta edición tenga problemas económicos que afecten a trabajadores", añadió. Según dijo, la situación económica es "complicada", y así se lo transmitieron a Monago, al que han comunicado lo que ellas conocen, algo que también han hecho ya con el Ministerio de Cultura. Las directoras del festival declinaron ofrecer más detalles sobre esta situación porque, según indicó Chusa Martín, es algo que compete a los patronos y a la Junta de Extremadura: "Todo lo demás serían especulaciones y, la verdad, no hay ganas de meterse ahí", añadió. En la citada reunión también conversaron sobre la programación y, en este punto, Portillo ha negado que hayan recibido presiones artísticas, "más allá de si hay personas a las que les gusta más o menos una programación".