Madrid. Ricky Martin realizó el anuncio de su homosexualidad "cuando ya no podía más" y dice que en el título de su nuevo disco, Más (Música+Alma+Sexo), traza un compendio del momento que vive, en el que dice sentirse "pleno como hombre, artista y padre". Frente a quienes le acusan de convertir su vida en una operación de mercadotecnia para promocionar su nuevo trabajo, que se publica mañana, señala que no tiene tiempo "para este tipo de pensamientos" y que ya hace un año que colgó aquel mensaje en su cuenta de Twitter: "Hoy acepto mi homosexualidad como un regalo que me da la vida".
"No sé si todo el mundo pasará en esta vida por donde yo he pasado. He tenido dos años muy espirituales, de mucha introspección", comenta sobre una catarsis que se inició antes de su álbum acústico MTV Unplugged (2006), cuando cogió la mochila y viajó sin itinerario previsto. "Quería silencio después de 25 años. Es lo que necesitaba para aceptarme como hombre y tomar la decisión de ser padre", algo que sucedió hace ya dos años y medio y que, según sus memorias recogidas en el libro Yo (Plaza&Janés), le empujó a convertirse en un ejemplo de verdad y "dignidad" para sus hijos. "Yo necesito estar bien para que ellos estén bien", dice. "Lo hice cuando lo hice, ni antes ni después, fue cuando ya no podía más", insiste.
Sobre la posible repercusión de su homosexualidad en su estatus de estrella mundial, vaticina que "a lo mejor hay personas que no me querrán y otras que me querrán porque lo soy" -y continúa-, "pero si me dejo llevar por mis seguidores en Twitter, ahora tengo dos millones". Además, se muestra agradecido por el respeto con el que se ha tratado la noticia, tanto en Latinoamérica como en un país tan "conservador" como EEUU, sobre todo por "los niños de catorce o quince años que están entrando en un conflicto muy intenso sobre quiénes son, sobre por qué se sienten raros y por qué su sociedad les dice que sus emociones están mal".
Llegados a este punto, con una biografía en el mercado que recoge desde los primeros años de su carrera hasta la actualidad, Martin lanza su novedoso disco de estudio, el primero íntegramente en castellano desde 2003, cuando presentó Almas del silencio, y el primero también en el que ha escrito todos los temas.
"Se pudo haber llamado Vida, pero hay 7.500 discos que se llaman así", cuenta sobre el curioso título del álbum, Música+Alma+Sexo, que es, dice, "donde estoy al día de hoy". "La vida sin sexo es como tomar café sin azúcar", bromea, y asegura que no tiene problema en que se siga hablando sobre su orientación sexual. Después de cantarle durante años a la mujer en temas como María o She bangs, no descarta que el protagonista de sus futuras composiciones sustituya el artículo ella por él.