barcelona. El cocinero Xavier Pellicer, chef del restaurante barcelonés Àbac, dos estrellas Michelin, ha interpretado 30 obras maestras de la pintura para las que ha creado otros tantos platos inspirados en los motivos, las texturas o los colores. Esas treinta recetas y sus equivalentes pictóricos han sido recogidos en el libro Grandes platos para treinta obras maestras de la pintura. El libro parte de una selección de treinta obras de artistas de todos los tiempos realizada por el crítico e historiador del arte Francesc Miralles, entre ellos Leonardo, Tiziano, Rembrandt, Velázquez, Barceló, Dalí, Mir, Miró, Goya, Van Gogh, Hernández Pijoan, Rubens o Tapies. Estos lienzos, explicó Miralles, tienen como protagonista la comida o la mesa, pero "también hay algunos que han sido elegidos por la significación de la obra o del pintor y que no tienen ningún tipo de relación con la cocina".
De este modo, añade el crítico de arte, "se han evitado la reiteración de naturalezas muertas y, al mismo tiempo, se ha subrayado el reto que el historiador del arte ha planteado al cocinero: cuál es la receta que es capaz de provocar cada pintura".
Pellicer ha confesado que "al principio fue complejo entender la asociación de un plato a cada cuadro y lo primero que hicimos fue familiarizarnos con los cuadros".
Por esta razón, Pellicer y su equipo colgaron en un despacho reproducciones de cuadros "para irnos impregnando en un ejercicio de dos meses". "Jugamos mucho con el cromatismo para buscar la textura y el color", revela el cocinero, quien admite que "algunos casos, como el de Hernández Pijuan estaban muy claro, pero otros requirieron mucha investigación y pruebas con diferentes alimentos".
La más sencilla de estas adaptaciones convierte el Espacio verde con huevo de Hernández Pijuan en una composición con un guisante del Maresme sobre un plato blanco.