Javier Bardem ha asegurado hoy haberse sentido engañado por los organizadores de un acto de lo que él creía que iba a ser un homenaje íntimo al cineasta Bigas Luna que resultó ser un evento promocional por lo que el actor decidió abandonar el hotel María Cristina de Donostia donde se había convocado.

"Esto es una encerrona", ha dicho el actor, visiblemente contrariado ante la masiva afluencia de medios de comunicación que esperaban la comparecencia de Bardem junto con Penélope Cruz y Jordi Mollá, protagonistas de la película 'Jamón, jamón' (1992).

Bardem, el único de los tres intérpretes que ha asistido a la cita, ha afirmado que lo hacía "por respeto a Bigas Luna y a su memoria" porque "los deseos de Bigas siempre son hermosos y por eso estoy aquí, pero esto no es lo que se nos había dicho", ha señalado.

El actor aceptó posar junto a la hija de Bigas Luna, Betty, y a Eduardo Donato, el porquero amigo del cineasta que cuidaba los cerdos con los que se elabora uno de los mejores jamones del mundo en opinión del director de "Huevos de oro" antes de irse a "tomar con toda urgencia" un avión.

Según Betty Bigas, poco antes de fallecer su padre expresó el deseo de que los protagonistas de su película 'Jamón, Jamón', con los que mantenía una relación excepcional, conocieran el que, a su juicio y tal como expresó públicamente, era el auténtico' jamón, jamón'.

Se suponía que el acto que se celebraba hoy al margen del Festival de Donostia, sería el colofón al Año Bigas Luna, celebrado con motivo del décimo aniversario del fallecimiento del cineasta.