La reestructuración que ha atravesado Warner Bros. durante los últimos meses debería tener sus primeros efectos en el mundo de los videojuegos muy pronto. Según parece la contratación del cineasta James Gunn como copresidente y codirector ejecutivo de DC Studios junto a Peter Safran supondrá un cambio en la forma en la cual se controlan las adaptaciones de la editorial.
En una reunión general con ejecutivos de la compañía, el jefe de Warner Bros. Discovery, David Zaslav, avanzó que el objetivo actual es "construir una biblia para un universo DC cohesivo". Esto quiere decir que todas las historias presentadas en películas, series de televisión, videojuegos "y más" tendrán que unificarse para construir un universo compartido.
De confirmarse significaría un cambio importante en la forma en que funcionan actualmente los juegos de DC. Si bien Rocksteady ha construido un "universo Arkham" cohesivo, no está ambientado en el mismo universo que juegos como el reciente 'Gotham Knights' o la serie 'Injustice' de NetherRealm Studios, por ejemplo. Por el momento, el único gran proyecto anunciado de DC para el comercio de los videojuegos es 'Suicide Squad: Kill the Justice League', también desarrollado por Rocksteady.
El juego de acción promete aportar una visión diferente del universo de la editorial con un grupo de villanos como protagonistas. Según los materiales difundidos hasta el momento, tendrá como principales enemigos a los miembros de una versión corrupta de la Liga de la Justicia. El grupo habría sido tomado por el villano Brainiac y por el camino han destruido gran parte del mundo, dejando como responsables de restaurar la normalidad a figuras como Harley Quinn, King Shark o Deadshot. Si bien Rocksteady trabaja en el proyecto desde hace algunos años, hasta ahora el desarrollador no ha revelado muchos detalles al respecto. Se espera que el juego haga su debut a finales de 2023 con versiones para PlayStation 5, Xbox Series y PC.