MADRID. El usuario de Twitter Elisabeth Potts Weinstein ha detectado que al firmar los términos y condiciones de la aplicación de edición de fotos, el usuario está cediendo el derecho a FaceApp a emplear sus fotos, nombre, voz e identidad con fines comerciales.
FaceApp es una aplicación gratuita que edita las fotos con filtros que transforman el rostro de la imagen. El 'software' permite hacer que los rostros parezcan más mayores, más jóvenes, de otro sexo o incluso añadir una barba de la manera más realista.
Según indican los términos y condiciones de la aplicación, al aceptar las condiciones "FaceApp posee una licencia con derecho de sublicencia transferible, perpetua, irrevocable, no exclusiva, libre de regalías, mundial, totalmente pagada, para usar, reproducir, modificar, adaptar, publicar, traducir, crear trabajos derivados, distribuir, ejecutar públicamente y mostrar su Contenido de usuario y cualquier nombre, nombre de usuario o imagen proporcionada en relación con su Contenido de usuario en todos los formatos y canales de medios conocidos o desarrollados posteriormente, sin compensación para usted".
Otro aspecto polémico de los términos es que indican que podrían transferir los datos de un Estado a otro para regirse por la jurisdicción de protección de datos de otro país, y que esta colección de datos sea legal. En la política de privacidad avisan de que "si se encuentra en la Unión Europea u otras regiones con leyes que rigen la recopilación y el uso de datos que pueden diferir de las leyes de Estados Unidos. Tenga en cuenta que podemos transferir información, incluida información personal, a un país y jurisdicción que no tenga la mismas las leyes como su jurisdicción en relación a protección de datos".