VALENCIA. Se trata de un dispositivo con microperforaciones que se podrá conectar al ordenador y a la tableta, haciendo que mediante un sistema electromecánico se activen y se eleven los puntos que correspondan de los 2.520 puntos de lectura braille con los que contará el sistema.
Aimme es una de las entidades colaboradoras y la encargada de fabricar un prototipo funcional del sistema interno que permita realizar el movimiento de la matriz de pines, así como la responsable de la integración de los diferentes sistemas desarrollados dentro de una carcasa que los envuelva.
"Estamos en la fase de integración de todos los componentes para poder validar que el producto hace lo que realmente hemos dicho que puede hacer", ha dicho Luis Marín Mateos, responsable de la Unidad de Desarrollo de Producto.
Luis Marín también ha explicado que la elevación de los puntos es mínima, pero suficiente para las personas acostumbradas al braille, y también ha anunciado que el prototipo se someterá a pruebas piloto "para que personas con deficiencia visual nos puedan dar su experiencia de uso".
Según Aimme, el objetivo final es fabricar una tecnología de bajo coste, interactiva y táctil que permita a las personas con discapacidad visual acceder no solo al texto, sino también a los gráficos de la información electrónica, y fomentar el empleo para este colectivo.
El proyecto, de nombre Tacmon 2, se encuentra todavía en la fase de construcción y la funcionalidad del sistema necesitará ser verificado por los socios del consorcio investigador.
Según datos del consorcio Tacmon 2, en Europa existen actualmente 7,4 millones de personas con deficiencias visuales.