El Baskonia arrancará hoy a las 20.30 horas su exigente semana con tres encuentros lejos del Buesa con la visita al Stark Arena, uno de los pabellones más temibles de toda la Euroliga y hogar de un rival directo en la pelea por el play in como el Partizan. Será sin duda el reto más difícil de la semana para los gasteiztarras, que si consiguen la gesta de obtener una victoria en una cancha de la que sólo tres equipos han salido ilesos en lo que va de torneo, darán un golpe casi definitivo a la clasificación para alcanzar la fase de eliminatorias tras cinco años sin llegar más allá de la liga regular.

Actualmente, el cuadro vitoriano ocupa la octava posición de la tabla con 16 victorias y 13 derrotas y el Partizan es quien ocupa la última plaza que da acceso al play in con tres triunfos menos que el Baskonia.

Teniendo en cuenta que los alaveses se impusieron en el duelo de ida disputado en el Buesa Arena por un apretado 84-83, una victoria esta noche supondría distanciar al Partizan en cuatro triunfos con el basket average a favor de los azulgranas, que se asegurarían terminar por delante de su rival en la tabla y sólo tendrían que defenderse del Bayern de Múnich y el Valencia Basket, que se enfrentan entre ellos esta jornada y también atesoran un 13-16.

Una derrota por el contrario, comprimiría enormemente la tabla en esa pelea por el play in, ya que el Partizan se colocaría a dos victorias de los alaveses posiblemente con el basket average a su favor a falta de cuatro jornadas, al igual que el equipo que salga ganador del Valencia Basket-Bayern.

Rival de enorme talento

Por lo tanto, es un encuentro de vital importancia tanto para el Partizan como para el Baskonia, aunque es el conjunto serbio el que tiene menos margen de error. Con tanto en juego, se espera que el Stark Arena, con capacidad para casi 20.000 espectadores, registre una gran entrada y presente un ambiente hostil para los gasteiztarras, que deberán hacer frente a la presión de la caldera serbia y a un rival con enorme talento ofensivo.

No es casualidad que el Partizan registre un balance de 10 victorias y 3 derrotas ante su público –lejos de su pabellón se muestra mucho más frágil con un 3-13–, ya que el Stark Arena es capaz de sacar la mejor versión de jugadores de la talla de Kevin Punter o James Nunnally, las principales estrellas del equipo con unos promedios 14,7 y 12,3 por encuentro. El primero se perdió el duelo de ida y puede ser esta vez un factor diferencial, aunque, por otro lado, no estará otra pieza importante para Obradovic como Zach LeDay.

El ala-pívot norteamericano se encuentra en Estados Unidos debido al reciente fallecimiento de su padre, por lo que salvo sorpresa no estará esta noche en el Stark Arena. También ha dejado Belgrado en los últimos días otro interior como Tristan Vukcevic, rumbo a la NBA.

En consecuencia, al Partizan le faltará algo de poderío interior, una zona, además, en la que ha tenido problemas durante toda la campaña tanto para defender como para cerrar el rebote, ya que es el equipo que menos rebotea de toda la Euroliga. La sombra de Lessort es alargada y Caboclo y Kaminsky no han logrado por el momento cumplir con las expectativas. Lo que no falta es amenaza exterior con Dozier Jr., Avramovic, Andjusic, Ponitka o los mencionados Punter y Nunnally.

Todos disponibles

La exigente cita le llega al Baskonia en uno de sus mejores momentos de forma de la temporada al haber encadenado cuatro victorias consecutivas entre ambas competiciones, por lo que seguro que plantará batalla.

Además, Dusko Ivanovic, según anunció en rueda de prensa, contará con toda la plantilla a su disposición con la única excepción del lesionado de larga duración Khalifa Diop. “La torcedura de tobillo de Moneke se quedó afortunadamente en un susto y Rogkavopoulos, que ha estado enfermo, ya se encuentra mejor, así que viajarán los dos”, afirmó. El técnico montenegrino necesitará exprimir al máximo sus recursos para asaltar el Stark Arena.