El Baskonia consiguió ante el Gran Canaria una importantísima victoria que le permite mantener el pulso por el liderato con el Barça, aunque para ello tuvo que realizar un enorme esfuerzo ante un rival que, pese a la fatiga de haber ganado la final de la Eurocup días antes, no se dejó nada en el tintero. De hecho, el partido tuvo que resolverse en la prórroga con un triple de Howard, que se vio recompensado tras mantener equipo a flote durante una segunda parte con mayor intensidad por parte de los canarios.

El encuentro, en el que Peñarroya alineó de inicio un quinteto alto formado por Thompson, Howard, Sedekerskis, Costello y Enoch, comenzó con desacierto en el tiro por parte de ambos equipos, que erraron lanzamientos asequibles y completaron los primeros cuatro minutos de partido con un corto marcador de 5-2. Una bandeja de Albicy y un triple de Brussino en jugadas consecutivas dieron algo de ritmo al encuentro y situaron al Gran Canaria –que no pudo contar con los lesionados Shurna y Benite– por delante, provocando a su vez la reacción local en ataque. A partir de ese momento, ambos conjuntos fueron intercambiándose golpes, los lanzamientos exteriores comenzaron a entrar y precisamente dos triples seguidos de Howard y Hommes dieron al Baskonia su ventaja más amplia del primer cuarto con el 19-15. Sin embargo, un triple de Salvó en un desajuste defensivo azulgrana permitió al Gran Canaria llegar al segundo parcial por delante (19-20).

Aunque las cosas habían mejorado en ataque, la intensidad defensiva aún seguía siendo baja, y fue el conjunto canario el primero en apretar los dientes atrás en la reanudación. Los hombres de Lakovic forzaron varias pérdidas locales, encontraron buenas situaciones de tiro y obligaron a Peñarroya a pedir tiempo muerto con un triple de Bassas que estiró la ventaja a los seis puntos (24-30), justo antes de tener que abandonar la cancha con una lesión muscular en el gemelo derecho. Las instrucciones del técnico catalán despertaron a los gasteiztarras y especialmente a Giedraitis y a Costello, que fueron los encargados de aportar energía al juego azulgrana y cambiar la tendencia del partido. Desde el 28-34 llegó un parcial de 13-1 con cinco tantos del lituano, generoso en el esfuerzo bajo los tableros, y una acción de 2+1 de Costello en un espectacular mate sobre Balcerowski. Slaughter y Diop respondieron, pero otro mate de Costello permitió cerrar la primera parte con el Baskonia al frente por 45-43

Howard al rescate

Pese a que los alaveses llegaron al ecuador con buenas sensaciones, al regreso de vestuarios fue el Gran Canaria el que pasó el rodillo dando al Baskonia de su propia medicina, con cuatro acciones de tres puntos en el primer minuto y medio de juego del tercer cuarto: dos triples de Brussino, uno de Slaughter y un 2+1 de Inglis. Con ello, lograron construir una ventaja de siete puntos (48-55) que comenzó a poner contra las cuerdas a los gasteiztarras, sin más respuesta en esos minutos que el acierto exterior de Sedekerskis. Reaccionaron los alaveses poniendo en marcha toda su maquinaria ofensiva y con el despertar de Howard en el tiro, pero fueron incapaces de sacar provecho de su acierto, ya que cada vez que lograban acercarse su tibieza defensiva en la pintura permitió al Gran Canaria responder con puntos de Carrera, Diop, Inglis o Brussino, más activos que Hommes, Kotsar y Enoch. Así las cosas, el parcial del tercer cuarto fue de 28-33 y se llegó a los 10 minutos decisivos con todo por decidir (73-76).

Los problemas atrás persistieron en la reanudación, mientras Howard tiraba del carro en ataque. Logró adelantarse el Baskonia por primera vez desde el inicio de la segunda parte con una canasta de Heidegger (83-82) y a partir de ahí el duelo se movió en unas diferencias mínimas que no superaron los dos puntos. A 40 segundos del final, ganaba 89-91 el Gran Canaria y Howard ejecutó una acción de canasta y personal con suspense en la que Peñarroya tuvo que pedir revisión, pero falló el tiro libre. Albicy erró un triple y el propio Howard el triple decisivo sobre la bocina, confirmando la prórroga.

En el tiempo extra, Peñarroya apostó por un quinteto más físico sin Howard, Thompson llevó la batuta del equipo enviando balones a los interiores, pero la igualdad persistió hasta que, a 35 segundos del final y con el Baskonia 98-97 arriba con un tiro libre de Kotsar, Howard anotó un triple en una jugada de pizarra dibujada por Peñarroya al que el Gran Canaria ya no fue capaz de responder. Con mucho sufrimiento, pero los vitorianos siguen colíderes. 

Te puede interesar:

Estadística del Baskonia

Estadística del Gran Canaria