Cuando se gana la Euroliga después de jugar una Final Four con eliminatorias a un solo partido, puede que la fortuna tenga algo que ver, pero alzar el título por dos temporadas consecutivas no puede ser cuestión de suerte. En el caso del Anadolu Efes, rival esta tarde del Baskonia, su clave del éxito no tiene ningún secreto más que el de contar con los mejores jugadores en su plantilla, y prueba de ello son los nombres que conforman su cuerda exterior, que si ya era temible las dos campañas anteriores, ahora ha ido un paso más allá con la incorporación de Will Clyburn.
Si se tuviera la opción de elegir libremente un quinteto de fantasía con jugadores actuales de la Euroliga, muchos de los entrenadores elegirían probablemente a tres jugadores del Efes para las posiciones de base, escolta y alero: Micic, Larkin y Clyburn. Poca presentación necesita Vasilije Micic, el gran nombre propio de la Euroliga en los dos últimos años. El director de juego serbio ha arrasado con casi todos los reconocimientos individuales (MVP de la Euroliga en 2021 y de la Final Four en 2021 y 2022) y vuelve a ser candidato a hacerlo con los 18,2 puntos, 6,5 asistencias y 3,2 rebotes que promedia en lo que va de curso para 22,6 créditos de valoración, solo por detrás de Vezenkov.
Pero es que la cosa no termina ahí, ya que el cuarto más valorado de lo que va de torneo es su compañero de equipo Will Clyburn (21,9), que fue el buque insignia del CSKA durante las últimas cinco temporadas y tras el veto de la Euroliga a los clubes rusos por el conflicto bélico con Ucrania decidió firmar por el Efes, en línea con el conocido refrán “si no puedes con el enemigo, únete a él”. Pese a llegar a un equipo repleto de estrellas, Clyburn, que también fue MVP de la Final Four disputada en Vitoria en 2019, no ha pasado a tener un rol más secundario, sino que sigue en sus extraterrestres números habituales e incluso los está superando. De hecho, es el máximo anotador de la Euroliga con 20,4 puntos por encuentro y también el sexto máximo reboteador con 6,3 por partido gracias a su privilegiado físico.
LARKIN, A LA ESPERA
Eso sí, lo lógico sería que una vez regrese Shane Larkin, el tercero del Big Three, los números de Micic y Clyburn, que están jugando casi 35 minutos por partido, desciendan ante la presencia de otro anotador compulsivo más, al que ya se conoce bien en Vitoria de su paso por el Baskonia. Hasta el momento, el internacional turco todavía no ha podido debutar esta campaña por una lesión sufrida en el Eurobasket y cuando parecía que iba a regresar y disputó sus primeros minutos en la liga turca, volvió a caer lesionado, por lo que es duda para el partido de hoy. Sin juntar a sus tres principales estrellas sobre la cancha, el conjunto de Ataman tiene un balance de siete victorias y cinco derrotas, por lo que da mucho miedo lo que este equipo puede conseguir una vez estén todos en condiciones físicas idóneas.
Eso sí, hasta el momento la baja de Larkin no se ha notado en exceso y eso se debe a que el cuadro de Estambul cuenta también con un banquillo de lujo para poder cubrir cualquier baja que se produzca en la cuerda exterior. El principal escudero de Micic y Larkin en los últimos años ha sido el exbaskonista Rodrigue Beaubois, que sería titular en la mayoría de equipos de la Euroliga y en el Efes suele partir como sexto hombre de la rotación de Ataman. Durante la baja de Larkin ha tenido que asumir un papel más protagonista y, de hecho, llega en un excelente momento de forma. El elegante escolta francés ha anotado al menos 19 puntos en sus tres últimos compromisos de Euroliga y viene de endosarle 25 puntos al Besiktas en la liga turca el pasado domingo. Sin ser tan artificioso como la pareja de bases titular, es un jugador muy consistente y fiable en ambos lados de la cancha.
El arsenal exterior del Efes, en cualquier caso, no termina ahí. También cuenta en sus filas con otros dos jugadores con muchos puntos en las manos como Elijah Bryant, pieza imprescindible del Maccabi entre 2019 y 2021 y campeón de la NBA en ese último año tras reforzar a los Milwaukee Bucks para el tramo final de la temporada, o Isaiah Taylor, que también cuenta con experiencia en la NBA y el pasado curso promedió nada menos que 14,9 puntos por encuentro en la ACB en las filas del UCAM, lo que le ha servido para ganarse un hueco en el Efes como refuerzo por la lesión de Larkin. Por tanto, los exteriores baskonistas deberán defender hoy con los cinco sentidos si pretenden atar en corto a las innumerables amenazas ofensivas con las que cuenta Ataman.
