vitoria - No hay tiempo para mucho más. El Baskonia necesita saber si Jayson Granger formará, finalmente, parte de su plantilla en el curso 2017-18. El acuerdo que parecía hecho hace apenas un mes todavía no se ha materializado, y lejos de que las partes se muestren más cercanas en su consenso, parece que existen desavenencias entre el base charrúa y la entidad de Zurbano, cada vez más impaciente por saldar su negociación con Granger y dedicarse a seguir conformando la plantilla, tanto con el puesto de base cerrado como si no.
El Baskonia y el ex del Anadolu Efes tenían ya apalabrado un contrato de dos temporadas con opción a una tercera, tal y como desveló este periódico. No obstante, el deseo de Granger de buscar acomodo en la NBA de manera insistente puede provocar que el cuadro alavés se canse de esperarle y recurra a otras alternativas, aunque sea el uruguayo la prioridad, tanto por sus características como por su condición de cupo.
Precisamente por esa condición, resulta necesario conocer el futuro de Granger. El devenir del charrúa es necesario no solo por cumplir la cuota de jugadores formados en el territorio nacional, sino también por afianzar de una vez por todas el puesto de base titular, que ocuparían él o Marcelinho Huertas. En un tercer lugar, algo más relegado por su juventud e inexperiencia en ACb y Euroliga quedaría en principio Luca Vildoza. En un mercado que cada vez cuenta con menos efectivos, la pronta decisión del uruguayo se antoja fundamental para que los planes del Baskonia no se vean aún más trastocados. Sin el fornido exterior, los directivos azulgranas deberían escrutar el mercado en busca de otro cupo en una posición diferente, lo que alteraría el planteamiento inicial de la plantilla.
Además, la encrucijada no parece estar cerca de decidirse porque aún podría entrar en escena el Unicaja. Aunque Granger aceptase la oferta baskonista -que habría que comunicar de manera oficial a la ACB-, la operación todavía tendría que pasar el filtro del derecho de tanteo, en posesión del club malagueño. Su presidente, Eduardo García, declaró el pasado martes que el Unicaja “estudiará” toda oferta que llegue por Granger desde un club de la ACB. Podría resultar que la entidad andaluza incluso iguale el contrato que presente el Baskonia para obligarle a realizar un desembolso por el jugador, por mucho que los verdes tengan la plantilla completa y hayan realizado otros esfuerzos económicos este verano. Sujeto al derecho de tanteo, el desembarco de Granger en el Buesa, si finalmente se produce, podría demorarse sobremanera, algo que desde luego juega en contra de los intereses vitorianos. Por ello, es crucial que el director de 27 años comunique su decisión al club alavés cuanto antes.
mcrae se acerca Si Granger parece no estar a día de hoy más cerca del Baskonia, un jugador que cada vez se muestra con más posibilidades de recalar en Vitoria es Jordan McRae.
El estadounidense de 26 años, que se avista como la primera opción de Querejeta para reforzar el perímetro, habría acercado posturas con el cuadro alavés para vestirse con la elástica azulgrana la presente temporada.
No obstante, en el Baskonia aún están pendientes de resolver el culebrón de Adam Hanga, cuyas opciones de quedarse en Vitoria se antojan prácticamente remotas. El Barcelona se encuentra negociando por un traspaso del húngaro que satisfaga tanto al jugador, ahora de elevado salario, como a las dos entidades, que pretenden llegar a un acuerdo lo antes posible. Este culebrón sin resolver es el principal causante de que la operación por Jordan McRae se haya ralentizado en las oficinas del Buesa Arena. El escolta norteamericano pretende ser uno de los referentes ofensivos en los esquemas de Pablo Prigioni, dadas sus buenas condiciones físicas y su capacidad anotadora, que hasta el momento apenas ha gozado de oportunidades en la NBA.
Así pues, todas las piezas del puzle están hiladas y es posible que vayan sucediéndose de manera consecutiva, como si de fichas de dominó se tratase. Primero debe irse Hanga, luego llegará McRae.
El futuro del Baskonia queda así pendiente de que se resuelvan los dos culebrones del verano que tanto han limitado los movimientos en los despachos azulgranas. Una vez que el futuro de Granger y Hanga quede decidido, los vitorianos apuntalarán la todavía incipiente plantilla, que posee las dos plazas de extracomunitario sin cubrir y nueve jugadores confirmados.