Donostia. Cada vez más modesta y con menos estrellas de relumbrón. Así se presenta la Liga ACB 2012-13 a tenor de cómo se está desarrollando el mercado de fichajes en lo que va de verano, ahora que los equipos ya han empezado a entrenar o están a punto de hacerlo. La crisis económica cada año azota con más dureza a la autodenominada como segunda mejor liga del mundo y eso se está notando, y mucho, a la hora de confeccionar las plantillas: muchas de las estrellas de la pasada temporada se han marchado a la NBA o a otras ligas europeas que les ofrecen más dinero, y los equipos están apostando por jugadores más jóvenes, con evidente talento, pero que todavía deben demostrarlo en la ACB.

La fuga de grandes nombres ha resultado masiva y es evidente que la competición bajará su nivel. Ya no jugarán en las canchas de la ACB jugadores como Andy Panko, James Augustine, Joel Freeland, Mirza Teletovic, Nik Caner-Medley, Nando de Colo, Víctor Claver, Aaron Jackson, Marko Banic, Pablo Prigioni o Mirza Teletovic, por citar solo algunas de las marchas más significativas. Todos ellos nombres difícilmente sustituibles.

Los únicos clubes que han bordeado la crisis son los dos grandes, el Barcelona y el Real Madrid. La diferencia entre ellos dos y el resto sigue aumentando año tras año. Los azulgranas han recuperado a Jasikevicius y han fichado a Tomic y Jawai para la pintura. Mantienen a Marcelinho, Navarro, Mickeal y Lorbek y pueden reforzarse más si dan salida a Eidson, mientras que el Madrid de Laso ha hecho el gran fichaje del verano: Rudy Fernández, una estrella que en lugar de irse, regresa a la ACB. Tanto Barça como Madrid vuelven a tener dos equipazos.

Entre los perseguidores de los dos grandes, el Unicaja está siendo uno de los más ambiciosos en el mercado, ya que ha fichado con buenos contratos a Calloway, Txemi Urtasun, Fran Vázquez y Sergi Vidal, cuatro jugadores muy cotizados en la ACB y que vienen de brillar el pasado curso. Algo más modestos parecen, a priori, los proyectos del Caja Laboral y el Gescrap Bizkaia, dos alternativas al poder. Los baskonistas han fichado a Rochestie, Causeur y Pleiss, buenos jugadores pero por ahora lejos del nivel de Prigioni o Teletovic, aunque están pendientes de cerrar la llegada de Cabezas. Los vizcainos, por su parte, han perdido potencial pero han traído a jugadores interesantes como Moerman, Zisis y Pilepic. El Valencia se ha quedado de una tacada sin Claver, Caner-Medley y De Colo y los ha sustituido por Tucker, Ribas, Kelati, Doellman y Dubljevic. Vistos los cambios en sus plantillas, se antoja complicado que Caja Laboral, Valencia o Gescrap planten cara de forma seria a Madrid y Barça.

Entre los conjuntos llamados a pelear por la zona media y baja de la clasificación, el ajuste en los presupuestos es aún más acusado. Un claro ejemplo es el Lagun Aro GBC, que ha perdido a sus dos mejores jugadores del pasado curso, Panko y Vidal, que por ahora se ha reforzado con Guille Rubio y el nigeriano Ibekwe y que completará la plantilla con un par de jóvenes más. Igual de modesto o más es el proyecto del Manresa, que se ha reforzado con jugadores procedentes de LEB Oro como Salva Arco, DeVries y Arteaga, por no hablar del Estudiantes, el Fuenlabrada o el Joventut, todavía con bastante trabajo por hacer, y el Valladolid, que solo tiene un jugador en nómina, Nacho Martín.

Algo mejor parecen estar sorteando la crisis económica clubes como el CAI Zaragoza o el Gran Canaria. Los maños han hecho fichajes importantes como Llompart y Norel, mientras que los canarios han firmado a Toolson, Newley, Báez y Slokar, un póker de refuerzos muy interesante. Por último, el único ascendido, el CB Canarias, se ha reforzado con Bivia, Saúl Blanco y el ex del GBC Ricardo Uriz.