El Kutxabank Araski le ha dado la vuelta en un corto intervalo de tiempo a un pésimo comienzo de temporada tras haber sumado cuatro victorias en los últimos cinco compromisos. Pues bien, las verdes disponen mañana (19.00 horas) de una inmejorable oportunidad para seguir alimentando su confianza, meter más tierra de por medio respecto a los puestos de descenso y de paso seguir soñando con un billete copero que hace un mes parecía una auténtica quimera.
Y es que el equipo que visita Mendizorroza es el farolillo rojo de la tabla que, para más inri, todavía no ha estrenado su casillero de victorias después de la disputa de las diez primeras jornadas.
El Embutidos Pajariel Bembibre, un clásico de la Liga Femenina que vive momentos de zozobra a nivel deportivo y también institucional con problemas de toda índole, constituye un rival propicio para que el Araski sume su segundo triunfo de la temporada al amparo de su afición.
La asignatura pendiente del conjunto dirigido por Madelén Urieta son los partidos de casa, ya que tan solo ha obtenido una alegría hasta la fecha en aquella cita ante el Spar Gran Canaria que se resolvió casi sobre la bocina.
El cuadro berciano se ha puesto hace escasas fechas en manos de Bea Pacheco tras la destitución de Popi González, quien incluso llegó a admitir públicamente que puso dinero de su bolsillo para los viajes de las jugadoras, a las que el club debería dinero. Sin embargo, su debut de la pasada semana en la pista del Cadi La Seu se saldó con otra clara derrota por 84-67.
Pacheco ha regresado al Bembibre tras una primera etapa, entre 2005 y 2010, en la que consiguió el ascenso a Liga Femenina 2 en 2006 y disputó una fase de ascenso a la máxima categoría en 2008.
El Araski se mide al equipo que más triples tira por partido en esta edición liguera, con mención especial para la estadounidense Marnelle Garraud y la portuguesa Joana Soeiro, que en el último compromiso lanzaron entre ambas la friolera de 26 veces desde la línea del 6,75. En las filas bercianas también destaca la presencia de la ala-pívot nigeriana Elizabeth Balogun con promedios de 10 puntos y 5 rebotes.
“No es casualidad que estemos logrando ahora tantas victorias porque venimos de hacer un gran trabajo. Tenemos muchas ganas de ganar ya en casa para que la afición pueda disfrutar. Debemos ser sólidas en defensa, esa será la clave para ganar el partido”, confesó Txell Alarcón, con permiso de Tamara Seda la jugadora más entonada en la última victoria de las alavesas en Maloste ante el Lointek Gernika en la prórroga.
