Aires nuevos en el Kutxabank Araski. Una regeneración de la plantilla en toda regla tras los discretos resultados de la pasada temporada. De hecho, el cuadro gasteiztarra ha sufrido una auténtica revolución. Y es que hasta seis caras nuevas presenta para esta campaña 2022-23, donde pretende dar guerra y subirse a las barbas de los más poderosos en la Liga Femenina.
La escuadra de Mendizorroza ha renovado el equipo prácticamente por completo. De hecho, tan solo dos jugadoras continúan en el proyecto verdinegro: María Asurmendi y Tanaya Atkinson. A ellas se podrían añadir las canteranas Maider Castellano y Marina Ortiz de Zárate, quienes ya debutaron con el primer equipo el año pasado y conocen a la perfección lo que es el Araski.
Las pujantes jugadoras gasteiztarras dan esta temporada un paso al frente y tendrán más peso. Tras una participación testimonial durante el curso 2021-22, el club confía en que dos de las perlas de su cantera, que alternarán el filial con el primer equipo, dispongan este año de más relevancia en las rotaciones de Made Urieta. En tiempos de apreturas económicas, además, apostar por la cantera constituye casi una obligación.
El resto de jugadoras no militaron el año pasado en el Kutxabank Araski. Seis fichajes ha realizado el club de Mendizorroza con el objetivo de volver a la zona noble: las ala-pívots Annika Holopainen y Agostina Burani, la pívot Maimouna Diarra, la base Florencia Chagas, la escolta Txell Alarcón y la alero Natalie van den Adel. Esta última regresa a la que fue su casa durante tres temporadas tras dos campañas en el Ensino de Lugo.
Las ocho salidas
Ellas serán las encargadas de cubrir el hueco dejado por Izaskun García, Katarina Zec, Gracia Alonso, Iulia Gladkova, Bea Sánchez, Leia Dongue y Tamara Seda, integrantes de la plantilla del Araski en la campaña 2021-22 y que ya no siguen en el equipo. Lo dicho, toda una revolución en busca de que entrara aire fresco en el vestuario.
Y es que tras dos discretas temporadas, el Kutxabank Araski espera volver este curso a pelear por los puestos cabeceros de la tabla. De hecho, en la campaña 2021-22 las de Made Urieta acabaron undécimas y el año pasado firmaron su peor clasificación de las seis temporadas que totalizan en la élite tras el ascenso al acabar duodécimas.
Ha sido un cambio radical con el único fin de volver a la zona noble. Y es que el Araski aspira a volver a la Copa de la Reina y a colarse de nuevo en los play off por el título como hiciera en las campañas precedentes. No en vano, hay que recordar que en el curso 2018-19, la escuadra alavesa concluyó la Liga Femenina en una meritoria séptima plaza y en la 2019-20 consiguió acabar en una excelente quinta posición, su mejor clasificación hasta la fecha.
Cambio de ciclo
Para lograrlo, en el seno del Kutxabank Araski son conscientes de que tocaba regenerar la plantilla. “Estamos en un cambio de ciclo renovando a parte del equipo y a la vez apostando por las más jóvenes. Queremos que la cantera dé un paso al frente”, señaló Iratxe Rodríguez, presidenta del Kutxabank Araski en una entrevista a DNA el pasado mes de julio.
Así es. Un soplo de aire fresco para que el Araski recupere esa chispa que parece haber perdido estas dos últimos cursos. “En los últimos años en el Araski no han salido las cosas como se esperaba y ahora toca empezar de cero”, señaló al respecto Natalie Van den Adel hace unas semanas. La exterior holandesa es consciente de que la clave para lograrlo reside, en su opinión, en que el equipo recupere su esencia de lucha y entrega.
El perfil de las nuevas jugadoras responde a esas necesidades de recuperar el ADN Araski. Baloncestistas guerreras y comprometidas. “Con hambre y ambición”, tal y como remarcó la propia Made Urieta durante la presentación de Txell Alarcón y Maimouna Diarra.
El Kutxabank Araski ha confeccionado este curso una plantilla que combina la veteranía de jugadoras como la base María Asurmendi, quien a sus 36 años asumirá la capitanía y llevará los galones del equipo, con jóvenes jugadoras como la triplista Txell Alarcón y la canterana Maider Castellano, ambas las más jóvenes del equipo con 19 años.
Savia nueva para este remozado Araski. Con la ilusión por bandera de sus jóvenes jugadoras. Esa es otra de las señas de identidad de este nuevo Araski. La plantilla alavesa del curso 2022-23 será una de las más bisoñas de la categoría con una media que alcanza tan solo los 26,4 años.
Muy joven. No es de extrañar si se tiene en cuenta que, además de Asurmendi, tan solo hay otras tres jugadoras que superan por poco la treintena –Diarra y Van den Alde (31) y Buradi (30)–, mientras que la finesa Holopainen cuenta con 29, Atkinson con 26, la canterana Ortiz de Zárate (22), la argentina Chagas (21) y las ya citadas Alarcón y Castellanos (19).
Todas ellas serán las guerreras del Araski que quieren cautivar de nuevo a los aficionados de Mendizorroza. Jóvenes, eso sí, pero sobradamente preparadas y con sobrada experiencia la mayoría de ellas en la liga española. Ahora toca esperar si la revolución verdinegra da sus frutos. Por ellas, desde luego, no va a quedar.
4. Annika Holopainen
Ala-Pívot. Pese a que se trata de su primer curso en España, la finesa (04-8-1993) tiene sobrada experiencia en Europa tras jugar en Islandia, Polonia, Alemania y Francia. En la liga 2 gala promedió 15,3 puntos y 4,8 rebotes.
7. Maider Castellano
Base. A sus 19 años, es una de las jugadoras que lleva más tiempo en la cantera. La joven directora de juego vitoriana, que ya debutó en la élite la pasada campaña, alternará el primer equipo y el filial de Primera Nacional.
9. María Asurmendi
Base. La navarra (4-4-1986) es la más veterana del equipo y cumplirá su cuarta temporada consecutiva. Será la encargada de conducir el timón y, sobre todo, de impregnar el espíritu guerrero a las compañeras.
10. Natalie Van Den Adel
Alero. Regresa a la que fue su casa desde 2017 a 2020 tras dos ejercicios en Lugo. La holandesa (25-10-1990) es una jugadora muy versátil, que promedió el año pasado 9,4 puntos y 3,4 rebotes en la competición.
11. Maimouna Diarra
Pívot. La senegalesa (30-1-1991) cuenta con una amplia trayectoria en España –Sant Adrià, Clarinos, Zamarat, Arxil y Campus Promete– y es todo un baluarte defensivo. Promedió el pasado ejercicio 8,6 puntos y 8,1 rebotes.
27. Agostina Burani
Ala-Pívot. Toda una institución con la albiceleste, con la que debutó en 2009. La interior (4-10-1991) ha jugado en su país, Italia y Francia; en España ha militado en el Estudiantes, Alcobendas, Badajoz y Campus Promete.
22. Tanaya Atkinson
Escolta. Segunda temporada en Gasteiz. La estadounidense (28-1-1996) fue la máxima anotadora de la liga con 16,4 puntos por encuentro y varias veces MVP de la jornada. Promedió 5,7 rebotes, 2,1 asistencias y 1,6 robos.
15. Marina Ortiz de Zárate
Alero. La canterana gasteiztarra (9-12-1999) volverá a compaginar el trabajo con el primer equipo, con el que ya debutó en enero ante el Leganés y con quien anotó sus primeros puntos ante el Girona, con su presencia en el filial.
14. Florencia Chagas
Base. La argentina (27-6-2001) llega a Vitoria procedente del Magnolia La Molisana Campobasso italiano. Durante la última temporada ha promediado 7,6 puntos, 2,5 rebotes y 1,7 asistencias en liga.
12. Txell Alarcón
Escolta. Tercera temporada en la élite. La catalana (31-7-2003) es una francotiradora letal. De hecho, con el Campus Promete consiguió ser la mejor triplista de la liga 2020-21 con un 56% desde más allá del 6,75.
