La pandemia del covid-19, una situación que ha trastocado completamente nuestras vidas, está provocando cambios continuos e inmediatos en la forma de comprar y de planificar futuras inversiones. Con una opinión pesimista generalizada sobre el futuro de la economía, las familias se muestran preocupadas por la situación financiera en los próximos meses. Y una de las consecuencias directas es que muchos alaveses han decidido alargar la vida de su coche.

La actual crisis sanitaria pesa mucho sobre la decisión de realizar una gran inversión, como es la compra de un vehículo nuevo. Hay familias que se plantean mantenerlo más de lo previsto inicialmente debido a la pandemia y a la incertidumbre económica que está provocando el coronavirus. Sin olvidar que las restricciones a la movilidad y el cierre municipal han provocado un frenazo importante del uso del vehículo privado, por lo que el cambio de coche ya no está en la lista de las prioridades de muchos hogares.

Las matriculaciones de turismos y todoterrenos en Álava cerraron el ejercicio 2020 con una notable caída del 22,4% en comparación con el año anterior debido a la pandemia del covid-19, ya que solo se vendieron 5.090 unidades en el territorio.

El ejercicio 2021 no ha empezado mejor y la tendencia a la baja continúa. En enero y febrero de este año se han matriculado 691 coches, con lo que la caída acumulada en los dos primeros meses se sitúa en el 32,8% en Araba.

La tercera ola de la pandemia del covid, la crisis económica, la falta de confianza y la sensación de incertidumbre surgida entre los consumidores a pesar del inicio de la vacunación, así como con el fin de las ayudas del Plan Renove y la subida del Impuesto de Matriculación, son algunos de los motivos que han provocado la fuerte caída de las ventas y que explican desde una parte fundamental del sector de automoción alavés, como son los concesionarios.

"Tenemos dos tipos de clientes. Por un lado, están las familias golpeadas directamente por la pandemia con una situación laboral inestable y sin saber qué pasará con sus empleos en el futuro. En estos casos, el cambio del vehículo deja de ser una prioridad. Y por otro lado, están los clientes con una situación más o menos estable a nivel laboral, con ganas de comprar un coche nuevo pero que en muchos casos tienen dudas sobre qué tipo de vehículo adquirir, si diésel, gasolina, eléctrico o híbrido", explica Óscar Uzquiano, director gerente de Autocentro Armentia, el concesionario oficial de Toyota ubicado en Alto de Armentia, 2.

A la pandemia se une la fase de transición en la que se encuentra el coche eléctrico, lo que genera incertidumbres en los compradores que prefieren aplazar la decisión hasta ver qué futuro se espera. "Decir que el coche con motor de gasolina o diésel tiene los días contados, y que el coche eléctrico debe suplantarlo es mandar un mensaje muy negativo y y que no se ajusta a la realidad a los conductores", explica Óscar Uzquiano. Expertos del sector incluso aseguran que para que la renovación del parque sea total pueden pasar varias décadas.

A la complicada situación de la pandemia hay que sumar que la subida del Impuesto de Matriculación está encareciendo el precio de la mayoría de los vehículos nuevos desde el 1 de enero de 2021. Si un cliente está pensando en adquirir un coche nuevo tiene que saber que desde el pasado mes de enero la gran mayoría de automóviles han sufrido una notable subida en el precio debido al aumento del impuesto de matriculación. Este impuesto grava a los turismos y furgonetas en función de su CO2 emitido por kilómetro, y a nivel estatal está exento todo modelo que baje de 120 g/km.

"Está suponiendo un incremento medio de un 5% en el precio de aproximadamente el 70% de los automóviles nuevos que se venden actualmente, lo que significa un notable desembolso para el bolsillo de los posibles clientes", explica el director gerente de Autocentro Armentia.

Desde el sector de la automoción alertan que más que una pérdida de matriculaciones, lo que va a suceder en muchos casos es que los compradores se decanten por modelos que paguen menos impuestos o que queden exentos porque realmente emiten poco CO2 y consumen poco.

El impuesto de matriculación, que grava la compra de coches nuevos, ha cambiado la forma en la que se calcula desde el 1 de enero, lo que encarece el precio de la mayoría de los vehículos al usar nuevos datos sobre sus emisiones de CO2.

Este gravamen que pagan los coches nuevos se calcula como un porcentaje sobre el precio de venta. Dicho porcentaje se fija por tramos, en función de las emisiones de CO2. Como estas emisiones están directamente relacionados con la cantidad de combustible que quema el coche, cuanto mayor sea su consumo, más alto será el tipo del impuesto a pagar.

2020: caída del 22,4%. Las matriculaciones de turismos y todoterrenos en Álava cerraron el ejercicio 2020 con una importante caída del 22,4% en comparación con el año anterior debido a la pandemia del covid-19, ya que solo se vendieron 5.090 unidades en el territorio.

Enero 2021: caída del 38%. La tendencia a la baja continúa con la llegada del nuevo año. En Araba el descenso de matriculaciones fue del 38% en enero en comparación con el mismo mes del año pasado tras haberse vendido 290 turismos y todoterrenos.

Febrero 2021: caída del 31%. Con respecto al mes de febrero, las matriculaciones de turismos y todoterrenos en Álava bajaron un 31% en comparación con el mismo mes del año pasado al venderse 401 vehículos, con lo que se mantiene la tendencia negativa con la que arrancó 2021.

Acumulado dos primeros meses del año: caída del 32,8%. Entre enero y febrero de 2021 se han matriculado un total de 691 coches, con lo que el descenso acumulado durante los dos primeros meses se sitúa en el 32,8% en Araba.

El director gerente de Autocentro Armentia explica que los clientes con una situación más o menos estable a nivel laboral tienen ganas de comprar un coche nuevo, pero en muchos casos hay dudas sobre qué tipo de vehículo adquirir, si diésel, gasolina, eléctrico o híbrido.

A la pandemia se une la fase de transición en la que se encuentra el coche eléctrico, lo que genera incertidumbre en los compradores