Jesús Owono, por supuesto, también habla del equipo durante su entrevista con DNA. La victoria frente al Real Betis no fue una más para el Deportivo Alavés, sobre todo después del inmerecido varapalo contra el Girona, y el guardameta piensa que puede ser la primera de las muchas "cosas bonitas" que están por llegar en los próximos meses.

Qué bien sienta ganar, ¿no?

La verdad es que sí. Teníamos ganas porque veníamos haciendo las cosas muy bien. El partido anterior, contra el Girona, se nos escapó cuando ya nos veíamos puntuando, ante el Valencia también tuvimos ciertos destellos y nos condenaron algunos fallos… En general, opino que estábamos mereciendo más. Y ganar así, fuera de casa, fue brutal.

Lo merecían y lo necesitaban después de ese varapalo en casa.

Sí, totalmente. Fue inesperada esa derrota, pero el fútbol a veces es injusto y caprichoso y hay que saber vivir con ello. A nosotros nos tocó pagar el pato frente al Girona, pero soy de los que piensa que este deporte te acaba devolviendo lo que te quita. Estoy convencido de que ahora vendrán cosas bonitas. 

Owono, durante su entrevista con DNA en Mendizorroza. Jorge Muñoz

Más allá de este último triunfo, se está viendo una mejoría semana a semana.

Sin duda. Nos estamos haciendo poco a poco a la idea del míster y ayuda mucho en ese proceso que todos estemos en el mismo barco. Sabemos cuál es el objetivo, queremos remar por él y ese esfuerzo diario es el que nos está haciendo crecer. Cada vez somos más ese equipo rocoso, más físico y con capacidad para proponer con el balón.

Llevan ya un mes con el Chacho, ¿ha habido altibajos durante esta adaptación?

No me lo ha parecido. Sabíamos que debíamos adaptarnos cuanto antes y, si algo tiene esta plantilla, es que es camaleónica. Nos amoldamos muy rápido a los cambios. No voy a negar que fue un varapalo al principio, pues estábamos acostumbrados a una forma de trabajar, pero la verdad es que estamos contentos. Le metemos muchísima caña cada día y considero que esa es la línea adecuada.

Tres puntos son tres puntos, pero hay ganas de brindar una victoria a Mendizorroza.

Obviamente. Ganar siempre sabe mejor en casa, porque estás con tu gente y lo celebras con los tuyos. Es la mejor sensación que tiene un futbolista. Y eso que a Sevilla y Valencia se desplazaron bastante aficionados. Ese es el objetivo contra el Celta. Hemos empezado la segunda vuelta con tres puntos y queremos alargar esto lo máximo posible.