Nadie mejor que un antiguo ciclista, por cierto un perfecto conocedor de lo que supone una carrera de fondo como la actual Liga SmartBank, para brindar su inestimable apoyo al Deportivo Alavés de cara a su final de este sábado en el Estadio Gran Canaria.

Con el fin de salir airoso del pequeño infierno amarillo y celebrar un histórico ascenso que sería el sexto de su historia, el equipo vitoriano necesitará el espíritu destajista y la mentalidad colectiva que en su día mostró Luis Mari Díaz de Otazu sobre la bicicleta. Entre otras pruebas, se metió entre pecho y espalda la friolera de 5 Vueltas a España, 5 Giros de Italia y un Tour de Francia. Con la salvedad de que siempre priorizó el lucimiento del líder de los equipos para los que corrió (2 años en el Seur y 9 en la ONCE) sobre su propio brillo individual.

Abonado del Glorioso desde hace más de dos décadas y un asiduo de Mendizorroza cada fin de semana, este histórico ciclista natural de Albéniz también confía ciegamente en las opciones de los pupilos de Luis García. “¿Si vamos a ascender? Yo espero que sí y pienso que sí, aunque supongo que ellos estarán igual. El final de temporada está siendo una locura y los equipos que ya han descendido han metido en problemas a los que se están jugando el ascenso. Parece que ninguno quiere subir. Es una categoría jodidísima. El año pasado no se subió con 80 puntos y ahora sí con 73”, reflexiona Díaz de Otazu.

Este Alavés tiene paralelismos con lo que fue su carrera de diez años de profesionalismo entre 1988 y 1998. Inasequible al desaliento. Picando piedra, un día sí y al siguiente también, en pos de un objetivo único que nadie en el entorno alavesista quiere dilatar más de este sábado.

“Lógicamente es mejor subir ya y no esperar al play off. De los tres que dependen de sí mismos para ascender, el que no lo haga esta jornada se va a llevar un palo. Eso sí, son profesionales y tienen que agotar todas las posibilidades”, advierte este antiguo ciclista, que también vivió en sus carnes los años más duros en los que el Glorioso se encontraba lejos de la zona noble y para quien “los dos últimos años en Primera División han sido una especie de tortura” debido a los apuros para ganar partidos.

Elogios a Guridi y Rioja

De lo que no hay duda es que en el Estadio Gran Canaria no puede haber pájaras ni desfallecimientos de ningún tipo. Luis Mari se congratula por “la sensación de superioridad” del Alavés en muchos tramos de esta temporada. “Tenemos un gran equipo y un gran entrenador con una gran afición por detrás, sobre todo las peñas. No sé lo que pasará pero ha sido un año bonito”, recalca este excorredor de 56 años.

Pese a su fortaleza grupal, del equipo babazorro se queda básicamente con “la lucha y el trabajo” de Jon Guridi o el vértigo de Luis Rioja en la banda izquierda. “Aunque en los últimos partidos quizá ha estado más bajo, me da la sensación de que siempre tiene algo más que ofrecer que los demás”, subraya respecto al extremo zurdo sevillano, fresco para la visita a la isla tras su ausencia por sanción ante el Málaga.

Sin embargo, Díaz de Otazu –como excelente gregario que fue en su día– reivindica que el Alavés es, ante todo, un buen colectivo y pone en valor la aportación táctica de Luis García. “Creo que les dice las cosas claras a los jugadores y, suba o no suba el equipo, le considero un buen entrenador. Yo seguiría con él la próxima temporada porque, además, no me gustan los cambios en el banquillo si no son obligados”, ensalza.

Entre las cosas que más le han sorprendido figura el rol secundario de Víctor Laguardia, a la sombra de Abqar y Sedlar desde que se subió al barco albiazul con la temporada ya iniciada. “Es alguien que en los entrenos se deja todo, pero el entrenador habrá visto que hay otros futbolistas en su puesto que lo pueden hacer mejor que él. Los titulares lo están haciendo bien y no hay nada que decir. Es un tío súper importante que, al menos, empuja desde el banquillo y tiene un sentimiento por el Alavés”, resalta Luis Mari.

Para acabar, también se atreve con su particular porra del partido en tierras insulares, donde el Alavés deberá abstraerse de la fuerte presión ambiental con casi 32.000 seguidores canarios llevando en volandas al Las Palmas. “Yo apuesto por un 0-2 con goles de Rioja y Villalibre. A Asier le vi ante el Málaga mejor que otros días y es su momento”, concluye el exciclista.