"Volver es un alivio", confiesa Sylla

Mamadou Sylla ya ve la luz al final del túnel. El atacante senegalés, que reapareció el pasado miércoles en el Heliodoro Rodríguez López tras más de tres meses en el dique seco, ha repasado en los medios del Deportivo Alavés el calvario que ha vivido desde que resultó lesionado en Can Misses en la tercera jornada liguera ante el Ibiza.

"Han sido tres meses muy complicados, mentalmente ha sido muy duro", ha confesado de entrada Sylla, que tras un inoportuno resbalón chocó violentamente contra el hierro de un banquillo iniciando así su particular pesadilla. Fue una jugada desgraciada por la que incluso estuvo cerca de acabar en el quirófano ante la dificultad para encontrar un diagnóstico.

"Muchos días parecía que la cosa no avanzaba y no te quedaba otra que seguir la línea marcada por los fisios y los médicos. Cada día tenía que hacer mañana y tarde para tratarme. La verdad es que mentalmente ha sido complicado porque muchas veces daba la sensación de que daba un paso adelante y luego, en cambio, a los dos días recaía. No sabía muy bien qué pensar, pero al final he conseguido lo que quería", recuerda Sylla.

Ahora que ya es uno más a las órdenes de Luis García, el delantero albiazul se siente "aliviado" y, de hecho, admite que "me he quitado un peso de encima". "Siempre me viene prácticamente la misma imagen de la lesión. Cuando el otro día estaba en la banda a punto de entrar, fue una satisfacción muy grande", añade.

Poco a poco deberá encontrar ese ritmo que le permita disponer de más minutos en una delantera babazorra que tampoco va sobrada de efectivos. Mientras tanto, no se olvida de los fisios albiazules con los que tantas horas ha pasado en los últimos tiempos.

"Parece que no, pero cada ánimo es importante, incluso de los trabajadores del club, los compañeros o el jardinero. Todo esto para un jugador lesionado ayuda en el plano anímico. Elorrieta y Mario son los que más tiempo han pasado conmigo y les quise dedicar el gol ante el Tenerife, pero no era el momento adecuado. Incluso tenemos una comida pendiente y solo quiero darles las gracias", concluye.