Pese a que catalogar cada partido como una final sea agotador, esta es la realidad que deberá afrontar el Deportivo Alavés todos los fines de semana hasta el próximo 22 de mayo. Sobre todo, tras su victoria ante el Villarreal de la última jornada, pues, aunque su rendimiento haya sido muy pobre a lo largo de la temporada, el conjunto babazorro por fin ha despertado -aún no se sabe si a tiempo o no- y, gracias a esa reciente reacción, ha llegado a la recta final del campeonato con opciones reales de conseguir una nueva permanencia.

Ahora bien, los albiazules tendrán que ir paso a paso y el primero necesitan darlo esta tarde, a las 18.30 horas, en Balaídos. Allí, con el apoyo de más de un centenar de alavesistas en las gradas, el Glorioso tratará sumar los tres puntos contra un Celta que, si bien está casi salvado matemáticamente y, además, se ha quedado sin la posibilidad de pelear por puestos europeos, no le pondrá nada fácil las cosas -tal y como pudo comprobar el Granada, también en la pelea por la salvación, hace unos días en Los Cármenes-.

Para ello, en una referencia a la última comparecencia de Martín Aguirregabiria, va a ser fundamental que la escuadra gasteiztarra demuestre desde el pitido inicial quién se está jugando su futuro. Algo que los pupilos de Julio Velázquez lograron, sin ir más lejos, en su duelo del pasado sábado, cuando, al contrario que en sus anteriores encuentros, saltaron al césped con el pie sobre el acelerador y, en consecuencia, obtuvieron su merecido premio con dos goles, que descolocaron a los groguets, en la primera media hora de juego.

Respecto a la convocatoria, las dos grandes novedades, aunque habrá que esperar hasta el final por dos jugadores en duda, son las ausencias de Rubén Duarte y Gonzalo Escalante, quienes, debido a la sanción por ciclo de tarjetas, no podrán ayudar al Alavés en su periplo por tierras gallegas. Por fortuna, esto último no debería ser mucho problema en los próximos tres partidos, pues, a la espera de lo que suceda en Vigo, los únicos apercibidos son Ximo Navarro, Edgar Méndez y Martín -por detrás están, todavía con tres amarillas, Laguardia, Loum, Manu García, Tomás Pina y Rioja-.

En este sentido, las opciones que puede barajar Velázquez para ocupar el lateral izquierdo son tres. Una natural, pero con muy pocas papeletas, como es de la Javi López, casi inédito este curso; y dos habituales, cuyos protagonistas son Tenaglia y el mencionado futbolista gasteiztarra, que podrían actuar en la derecha y, de esta manera, mandar a Ximo al carril zurdo o a la inversa. Luego, en lugar del centrocampista argentino, Toni Moya, Pere Pons y, sobre todo, Pina están en posición de completar la medular -siempre y cuando, eso sí, el entrenador castellanoleonés no opte por varias el dibujo-.

El Celta, por su parte, llega a esta 35ª jornada sin preocupaciones en lo deportivo, ya que, tal y como se ha adelantado, su continuidad en la máxima categoría es prácticamente matemática -y no puede aspirar a más-, pero con alboroto fuera de los terrenos de juego debido al juicio de Santi Mina. Y es que, tras ser condenado a cuatro años de prisión por el abuso sexual a una mujer en la localidad almeriense de Mojácar, el club vigués optó por apartar del equipo a su atacante.

En lo referente a la lista de los locales, las bajas no van a ser un quebradero de cabeza para Eduardo Coudet. El técnico argentino podrá contar con toda su plantilla a excepción de Mina y, en su lugar, podrían aparecer de inicio Denis Suárez, Nolito o Thiago Galhardo, único delantero centro de la primera plantilla a su disposición además del siempre titular Iago Aspas.

PRECEDENTES

Por último, cabe mencionar que, si se echa un vistazo al historial de enfrentamientos entre el Celta y el Alavés en Balaídos, la realidad es que los resultados nunca han sido muy favorables para los intereses babazorros. En concreto, el Glorioso ha visitado 33 veces el feudo celeste y solo se ha llevado seis triunfo, aunque uno de ellos, eso sí, le permitió asegurar su permanencia en la división de plata.