l Granada no le importa lo que diga el DNI de sus futbolistas. La edad, lejos de ser un factor determinante, pasa a un segundo plano en un club que aúna juventud y experiencia. Lo comprobará esta misma tarde el Alavés en el segundo partido liguero de una temporada en la que los andaluces están compitiendo en Europa por primera vez en su historia. Se estrenaron el pasado jueves en Albania con una cómoda victoria ante el Teuta -el Locomotive Tbilisi será su rival en la siguiente eliminatoria-, con una plantilla que presenta varios cambios de calado respecto al ejercicio anterior y que ya evidenció que quiere seguir la misma senda exitosa, como refrenda su triunfo contra el Athletic. Llama la atención, por encima del resto de demarcaciones, la renovada imagen que proyectarán los nazaríes en su delantera. No hay rastro del andaluz Carlos Fernández, de vuelta al Sevilla tras finalizar su cesión en un equipo en el que se reivindicó en Primera División con diez goles en 34 partidos. Para suplir su sensible ausencia, sin embargo, el Granada se movió con celeridad en el mercado en busca de gol. Y para firmarlo puso sus miras en el veterano Jorge Molina (Alcoy, 22-IV-1982), cuya incorporación no tardó en cerrar después de que el punta alicantino, a sus 38 años, rescindiera el contrato que le ataba al Getafe.
El movimiento tiene su miga, pues ahora mismo los dos delanteros que figuran en el plantel granadino suman en total 73 años. Los 35 restantes, no en vano, son los de Roberto Soldado (Valencia, 27-V-1985), formando ambos, con diferencia, la pareja de arietes más veterana en una liga en la que uno y otro aspiran a seguir goleando al calor de la experiencia que atesoran. De momento, Soldado ha sido el referente como titular en los dos primeros partidos oficiales y apunta a ejercer de entrada esta tarde como única referencia ofensiva de un equipo en el que el valenciano ya dejó su huella la pasada temporada. Sus siete tantos en liga y cuatro en Copa reflejaron el notable estado de forma de un jugador que, pese a encarar los últimos años de su carrera como profesional, firmó en julio su renovación hasta el 30 de junio de 2021 con la misión de volver a poner su instinto goleador al servicio del Granada. De momento, la primera muestra ya la dejó el jueves en Albania, con su primer gol de la temporada.
Con idéntico cometido ha aterrizado Jorge Molina en Los Cármenes, donde ha llegado como contraste el joven Alberto Soro procedente del Real Madrid, que también ha dado el visto bueno a la cesión por un año más del central Jesús Vallejo. El cotizado centrocampista Luis Milla, fichado del Tenerife; el venezolano Yangel Herrera, quien cumplirá su segunda campaña a préstamo en el Granada; y el extremo Roberto Kenedy, cedido por el Chelsea, también han tenido protagonismo en el mercado estival de un club sin límite de edad.
De momento, Molina solo ha disfrutado de 45 minutos en la segunda parte contra el Teuta. Pero no por jugar con un solo punta va falto de gol el equipo de Diego Martínez. Milla y Herrera firmaron las dianas que le sirvieron a los andaluces para abrir curso liguero con victoria ante el Athletic, siendo el venezolano protagonista principal de nuevo en Albania con otros dos tantos, que se añadieron al ya referido de Soldado y a uno más de Kenedy.