Buen año con el juvenil de División de Honor albiazul y de premio convocado con la selección española sub' 19. ¿Cómo lo ve?

La verdad es que en la temporada con el juvenil hemos hecho más de lo que teníamos en mente. Se ha hecho un buen año, pero sobre todo el que se lleva la palma de todo esto es el Preferente por conseguir el ascenso a Tercera. Y lo de la selección, pues es algo también que no me esperaba para nada.

¿Por qué?

Por la calidad y los equipos de los jugadores que van convocados. Pero bueno, se ve que cuando he ido parece que he hecho las cosas bien y se me quiere seguir dando esa oportunidad.

Ahora, para rematar, lo ideal sería poder formar parte del combinado que dispute el Campeonato de Europa de la categoría a mediados de mes en Bucarest. ¿Lo ve posible?

Está complicado, ya que ahora estamos convocados 23 y al Europeo van sólo 18. Toca trabajar e intentar hacerse un hueco ahí.

Aunque la competencia sea dura ya que se va a encontrar con rivales del Madrid, Barça, Arsenal y Athletic entre otros, una vez llegado hasta aquí, ¿no se arrugará ante nada y tratará de evitar ser uno de los cinco descartes?

Claro. No tienes que pensar quienes son ni de dónde vienen. Al final es un puesto, se van a quedar varios jugadores y tu tienes que darlo todo para intentar ser el que juegue en esa posición. Hay que ir a muerte y sin miedo a nada, ya que llegados a este punto hay que darlo todo, exprimirse al máximo y lo que salga salga. Con esta oportunidad que me dan, ¡sólo faltaría ir con miedo y pensar que porque es del Madrid es mejor que yo! Así no se puede ir.

En el plano colectivo también ha sido una gran temporada y, pese a ser un recién ascendido, el Alavés juvenil ha completado una gran campaña en la División de Honor, hasta el punto de acabar cuarto por detrás de históricos como Athletic, Real y Osasuna. ¿Qué le dice eso?

Que se tiene que ver que el Alavés tiene una buena cantera y aunque parece que el primer equipo está en una categoría menor al resto, se ha demostrado que la base no está tan lejos. La gente se tiene que dar cuenta de que aunque las expectativas no eran tantas como el cuarto puesto que hemos conseguido, se han hecho las cosas muy bien y creo que el próximo año se mantendrá igual.

Viendo el buen año que ha tenido la cantera albiazul, ¿cree que debería ser el momento de apostar de una vez por todas por la factoría Ibaia?

Eso es algo que se lleva tratando unos cuantos años. Últimamente nos dan la oportunidad de hacer la pretemporada y ahí está en nuestra mano ganarnos esa confianza, pero parece que de momento no acaban de cuajar las cosas.

A Alex Vallejo le gustaría que al final acabasen cuajando.

Pues sí que habría que apostar más por la base. Al final estás todo el verano trabajando para intentar hacerte un hueco y poder estar en la primera plantilla y ver que no llega nada, te sientes incluso un poco decepcionado y piensas que no vale nada lo que has hecho.

¿Se resigna?

No. Si nos dan la oportunidad a unos cuantos de hacer la pretemporada otro año, pues a apretar otra vez al máximo para ganarnos ese puesto.

En épocas de crisis, la opción de tirar con los de casa suele ser una buena solución. ¿Lo ve así?

Pues claro. Al final es un jugador que ha estado toda la vida en la casa, que no te va a suponer un gasto, ya que precisamente no estás en un buen momento para gastar y además incluso puede dar mejor rendimiento que otro que puedas comprar.

¿Qué puede aportar la gente de casa al Alavés para que de una vez por todas se les den más oportunidades?

El sentimiento y el identificarse más con lo que es el Alavés. El hecho de haber pasado aquí tantos años y haber convivido con las situaciones duras que está pasando el club, eso un jugador de fuera no lo tiene y es un plus que sí dan los de la cantera.

Además, este año parece más factible que el primer equipo pueda echar mano del filial al estar éste en Tercera y no ser un salto tan grande como el pasado ejercicio cuando militaba en Preferente. ¿Qué le parece?

Así es. Eso ha sido otro punto en contra nuestro este año ya que la diferencia de categoría de Preferente a Segunda B es muy grande y en cambio este año de Tercera no lo es tanto, por lo que yo confío en que en el caso de que haga falta algún jugador se atrevan a dar ese paso.

Y, el futuro de Alex Vallejo, ¿está en el Alavés B en Tercera división?

De momento, me queda un año de contrato y aunque la nueva directiva aún no ha hablado nada con nosotros y no sé cuándo lo hará, pero en principio creo que en el Tercera sí que tendré un hueco.

De seguir en casa como parece, ¿confía en disponer de alguna oportunidad más y poder actuar con el primer equipo o lo ve complicado y cree que volverá a ser sólo un comodín para los entrenamientos?

Esa es la esperanza que tenemos todos los de la cantera. Confiemos en que al final la gente de arriba pueda ver que los de casa podemos rendir también al máximo nivel.

¿Ha soñado ya con su debut?

El año pasado hubo días en los que parecía que iba a estar cerca, que iban a llegar por lo menos unos minutillos aunque sea, pero no llegó. Pero nada, a seguir trabajando, que no queda otra.

¿Cómo se lo imagina?

Complicado, sobre todo por los nervios. Pero bueno, cuando debutó Montoya la gente le animó y le apoyó mucho y eso es un punto a favor, que te hace estar más tranquilo y relajarte.

Entiende también que debido a la delicada situación económica del club, quizá no pueda triunfar en el equipo de su vida y pueda ser traspasado para que la entidad pueda obtener un beneficio. ¿Cómo lo ve?

Al final si la situación del Alavés no es buena y toca salir para ayudar al club en lo económico, pues habrá que hacerlo. Pero bueno, a mí sí que me gustaría por lo menos llegar a debutar con el primer equipo.

Ahora, con la llegada del Baskonia, ¿cree que llegará al fin la estabilidad al club?

Esperemos. Parece que las cosas se van a hacer de otra forma y el dinero, que al final es lo que cuenta para que todo vaya bien, parece que ahí está. Ahora confiemos que en lo deportivo se organice todo bien y tiré para delante.

¿Cómo ha vivido todo este proceso de la capitalización y los problemas que han rodeado al equipo en estos últimos años?

Los entrenadores nos decían que ese tema lo dejásemos aparte y que nos dedicásemos a jugar, pero al final claro que te llega y hay cierta inquietud por si de un día para otro desaparece. Piensas qué va a pasa, dónde vamos a ir, pero bueno, gracias a Dios no ha pasado eso y el Alavés sigue para delante.

¿Es de los optimistas que cree tal y como reza el himno albiazul que el Alavés resurgirá potente otra vez?

Por supuesto. No tengo pero ninguna duda. Este año se ha quedado a las puertas, pero confío en que el próximo todo salga bien.

¿Qué habría que hacer para que el Alavés vuelva a ser el que fue?

Tener la ilusión y confiar en que todo va a volver a ser como antes. Si estás con la mentalidad de que no van a cambiar las cosas, pues así no se puede tirar para arriba.

La que sigue siendo la misma es la afición que no ha abandonado al equipo, pese a la que estaba cayendo. ¿Qué le parece esa fidelidad?

Su apoyo ha sido muy positivo. Ellos han seguido animando y confiando en el Alavés y eso ayuda mucho al rendimiento de los jugadores. Siempre han estado ahí y poco más se puede decir.