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Ramiro González defiende que el proyecto eólico de Labraza es "viable y absolutamente riguroso"

Elkarrekin denuncia que la central se realiza "sin una evaluación ambiental estratégica completa"

Ramiro González defiende que el proyecto eólico de Labraza es "viable y absolutamente riguroso"Alex Larretxi

El diputado general de Álava, Ramiro González, ha defendido que el proyecto de la central eólica de Labraza es "viable y absolutamente riguroso", por lo que "se puede construir", tras "haber pasado todos los controles y procedimientos", y "acreditar que cumple con toda la normativa".

González ha considerado "lógico" que el proyecto siga "adelante", a interpelación de Elkarrekin Araba sobre la admisión a trámite por parte del TSJPV del contencioso-administrativo interpuesto contra el proyecto de la central eólica de Labraza, en el pleno de control de las Juntas Generales de Álava.

El diputado general de Álava ha reconocido que "todos los proyectos tienen inconvenientes", pero ha subrayado que la central eólica de Labraza "ha pasado una serie de controles y de procedimientos extremadamente rigurosos", por lo que "está acreditado que cumple con toda la normativa".

Por ello y, "mientras no haya inconvenientes legales, lo más lógico es que el proyecto siga adelante". "Esa es la posición de la Diputación Foral de Álava, ya que se ha concluido que este parque es viable, se puede construir y tiene todas las garantías. No ha habido ninguna resolución judicial que lo ponga en tela de juicio", ha incidido.

En imágenes: Manifestación en contra de los macroproyectos de parques eólicos y fotovoltaícos

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Por otro lado, ha indicado que un tribunal admita a trámite un recurso contencioso administrativo "solo quiere decir que se ha dirigido al tribunal competente y que está formalmente bien presentado desde el punto de vista formal". "No quiere decir nada más, ni supone prejuzgar el fondo del asunto, ni que se vaya a estimar el recurso en absoluto", ha añadido.

A su juicio, que se haya admitido a trámite "no implica ningún juicio sobre la legalidad del proyecto", ya que las valoraciones aportadas en los recursos "son valoraciones de parte, legítimas y respetables, pero que no quiere decir que vayan a ser estimadas".

Asimismo, ha expuesto que las partes recurridas "deben de tener mucha confianza en la legalidad del proceso, porque han comenzado las obras". "El tribunal no ha paralizado el comienzo de las obras y dentro del orden contencioso administrativo cabe la solicitud de paralización de las obras y eso no ha ocurrido. Por lo tanto, las obras comienzan con plena legalidad y con absolutas garantías legales", ha apostillado.

González ha apremiado a "impulsar la generación de energía renovable con todo tipo de garantías" y ha sentenciado que el proyecto eólico de Labraza "ha tenido todo tipo de garantías durante su proceso legal".   

TERRENOS PROTEGIDOS

Por su parte, el portavoz de Elkarrekin Araba, David Rodríguez, ha puesto el énfasis en que el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco ha admitido a trámite dos recursos contenciosos administrativos contra el proyecto de Labraza, en el municipio de Oyón, elevados por la Junta Administrativa de Labraza y el Consejo Regulador de Denominación de Origen Calificada Rioja.

Ambos organismos consideran que la aprobación definitiva del Plan Especial del parque eólico se hizo "sin la debida información pública, sin el estudio de impacto ambiental estratégico requerido y sobre terrenos protegidos por su valor natural y medioambiental".

Según ha manifestado Rodríguez, denuncian que el proceso se ha llevado a cabo con "falta de participación ciudadana y con un fraccionamiento del proyecto, para evitar que se realice una evaluación ambiental estratégica completa".

Elkarrekin Araba ha recriminado que el proyecto provocará una "desforestación significativa, afecciones a la biofauna y una alteración irreversible del paisaje y los ecosistemas de la zona", por lo que ha mostrado su "evidente preocupación".

Por último, ha asegurado que la instalación del parque eólico supondrá para las arcas municipales de Oyón un ingreso inicial de alrededor de 1,2 millones de euros y unos 230.000 euros anuales en concepto de impuestos y cánones. A pesar de ello, ha reprochado que "los beneficios económicos no compensan con las amenazas al paisaje, al patrimonio y a la biodiversidad".