El conjunto monumental de Quejana avanza en su ambicioso proceso de recuperación, iniciado en la recta final de 2022 tras pasar a manos de la Diputación Foral de Álava.
El complejo ayalés, que ha tenido como primer hito en esta nueva era la reapertura al público de las visitas, tendrá a futuro otros usos llamados a afianzarlo como "motor" de la comarca, tal y como ha avanzado este viernes el diputado general de Álava, Ramiro González, en el Pleno de control de las Juntas Generales.
La Diputación lanzará este próximo mayo un concurso de ideas que servirá para delimitar la actividad o actividades adicionales -más allá de las visitas- que el conjunto acogerá en los próximos años.
Según ha deslizado González, serán usos que "deberán autofinanciarse", vinculados por tanto a una "actividad económica". El jurado, en el que habrá expertos internos y externos, valorarán la calidad técnica de las propuestas, su enfoque integral, su viabilidad económica o su "solidez".
Ideas "innovadoras"
El máximo responsable foral espera que en el procedimiento abierto se reciban "ideas novedosas, innovadoras" para seguir devolviendo a la vida Quejana, "un elemento estratégico para dinamizar la comarca".
El concurso se resolverá en septiembre y, a partir de ahí, una vez conocido el "uso o los usos" que se sumarán al complejo, el concesionario se hará cargo de las obras y pondrá en marcha las actividades previstas.
González, que ha respondido a una interpelación planteada por la jeltzale Idoia Goiri, ha recordado que la Diputación alavesa ya está "protegiendo y conservando" el conjunto monumental tras formalizar su compra en la recta final de la pasada legislatura.
Existe, de hecho, un plan integral para poner en valor el complejo ya en marcha y el ente foral ha adoptado "las medidas necesarias" para recuperar las visitas, paso previo a una nueva etapa de "oportunidades" derivadas del concurso de ideas que muy pronto será realidad.
Producciones audiovisuales
Un buen ejemplo de ello son las producciones audiovisuales que el conjunto monumental ha acogido también en los últimos tiempos, con el rodaje de la película Historias de Halloween como ejemplo más reciente. "Y esto es solo el principio", según ha aventurado el máximo responsable foral.
“Quejana tendrá ya los cimientos de una nueva era. Al bien cultural y patrimonial que vamos a cuidar y proteger se unirá esta faceta estratégica tractora e impulsora del desarrollo económico de la comarca, con una visión del siglo XXI”, según ha destacado González.
Dos tipos de uso
La Diputación ha definido, de hecho, dos tipos de usos para Quejana en el trabajo que durante los últimos meses ha llevado a cabo para diseñar y preparar el concurso de ideas.
Una parte del vasto conjunto monumental la reserva para la gestión y las actividades ligadas a su competencia, entre las que se encuentran las visitas a la zona de la capilla y la torre.
El resto de los espacios, los que serán objeto de la convocatoria abierta, son los que albergarán las iniciativas de actividad económica todavía por definirse.
La Diputación Foral adquirió los inmuebles del conjunto monumental de Quejana, que pertenecían a la Congregación de Madres Dominicas del Monasterio de Santo Domingo de San Sebastián, en diciembre del año 2022. Concretamente, el Torreón Capilla Virgen del Cabello, la casa cural y otras edificaciones. El interés de la adquisición del conjunto completo obedeció a un empeño "mantenido a lo largo de los últimos veinte años", según ha recordado este viernes Ramiro González, por la protección y la recuperación de este bien cultural del patrimonio alavés. El complejo ha sido declarado Conjunto Monumental del País Vasco e incluido en el listado de Bienes Culturales Calificados del Patrimonio Cultural de la CAV. Por su valor histórico y artístico, está considerado uno de los ejemplos de patrimonio civil mejor conservados.