Las familias de la ikastola Etxaurren de Ayala lo tienen claro, continuarán con las protestas y movilizaciones que llevan realizando desde el comienzo del curso, el pasado jueves, mientras el Gobierno Vasco y diversos operadores de transporte escolar no pongan fin al conflicto que ha ocasionado -según la cifra proporcionada por el propio consejero de Educación, Jokin Bildarratz- que 7.400 alumnos y alumnas de toda Euskadi no dispongan del servicio que les lleva cada día a la escuela.
"Seguirán las caravanas"
“De momento, se ha decidido continuar con las caravanas de coches, como la que realizamos el pasado viernes y, asimismo, convocaremos otras concentraciones de las que iremos dando cuenta”, explicó ayer a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, la presidenta del AMPA de Etxaurren Ikastola, Ana Martínez Solaegi, al término de la asamblea extraordinaria que celebraron para valorar seguir movilizándose en contra de la privación del derecho al transporte escolar que se está sufriendo por parte de la mayoría de las familias del centro.
“De momento, se ha decidido continuar con las caravanas de coches, como la que realizamos el pasado viernes y, asimismo, convocaremos otras concentraciones de las que iremos dando cuenta”,
Marcha a pie
Ésta tuvo lugar una vez que los 238 estudiantes del centro accedieron a sus aulas, tras la marcha a pie, movilizándose por la carretera, con la que visibilizaron lo que supone estar en esta situación, al tiempo que reivindicaron a las partes implicadas una solución inmediata.
En ella tomaron parte en torno a 200 personas de Ayala y Okondo, entre alumnado, padres, madres y profesorado, entre las que también se pudo ver al propio alcalde de Ayala, Pruden Otegi de EH Bildu, y su socia de Gobierno, Iratxe Parro de Aiara Batuz, en un recorrido que arrancó, en torno a las 08.45 horas, desde la salida a la carretera de Zuaza de la pista de atletismo situada detrás de la ikastola, hasta la entrada de la misma.
Pancartas
Como habían solicitado la jornada previa desde la AMPA, los asistentes acudieron vestidos con las camisetas y sudaderas verdes de la ikastola para que se les viera bien y portando pancartas y carteles, que cada cual confeccionó a mano en su casa, en los que se podían leer, tanto en euskara como en castellano, lemas tales como “Ni chantajes ni sobornos, solución”, “Quiero mi autobús ya” o “Bildarratz, Cuadra, Sobrón, solución”. La estampa era bastante diferente a la vivida el lunes, cuando se optó por todo lo contrario: una huelga de asistencia, que implicó no llevar a los niños y niñas a clase y que fue secundada “por más del 86% del alumnado, pese a las condiciones que ello conlleva para la conciliación laboral-familiar”, ha subrayado Martínez Solaegi.
Quebradero de cabeza
Y es que la falta de autobuses -desde el inicio del curso solo está llegando al centro un autobús de las tres empresas de transporte que prestan el servicio a la Ikastola Etxaurren, en un total de ocho rutas- esta suponiendo un auténtico quebradero de cabeza para muchas familias, que tienen que reorganizar su rutina diaria y horarios laborales para llevar a sus hijos en coche a clase. Un problema que se magnifica en el centro ayalés, donde el 98% de su alumnado (residente en los 24 pueblos del municipio de Ayala, más el de Okondo) depende de este servicio para llegar al centro, pues se encuentra ubicado en el barrio Ibaguen de la localidad de Zuaza, al pie del tramo de la carretera A-624 que comunica Respaldiza con Artziniega y, por tanto, alejada de cualquier núcleo poblacional.
“Ya es el cuarto día de curso y la situación con el transporte no ha cambiado
“Ya es el cuarto día de curso y la situación con el transporte no ha cambiado. Las familias continuamos haciendo encaje de bolillos para traer a nuestras hijas e hijos al centro y ni Gobierno Vasco, ni las empresas de transporte, parecen que tengan intención ninguna de acabar pronto con esta situación. Además, durante estos días solo vemos en los medios de comunicación lanzarse excusas y puyas unos a otros”, leyeron en un comunicado al finalizar la marcha, en el que se dirigieron tanto al consejero de Educación como a las empresas de transporte urgiéndoles a terminar con el conflicto.
Solución ya
“El señor Jokin Bildarratz dice que las empresas están utilizando a las familias como rehenes y a modo de chantaje para que el Gobierno Vasco ceda a sus peticiones, rematando la jugada con un anuncio de una partida de ayudas a las familias por los kilómetros realizados. Y nosotros le decimos que no sabemos quienes se sienten rehenes de esta situación, pero sí que a las familias de la escuela pública vasca no se las compra con sobornos ni migajas, esta situación nos sale más cara que el precio de unos litros de gasolina. Hacen falta soluciones reales y no parches”, espetaron.
Subida de un 25%
Por otro lado, las empresas de transporte recibieron el año pasado una subida de casi un 25%, y lo que para alguna de ellas parece ser suficiente, sin embargo para otras no lo es.
