Las altas temperaturas, junto con la falta de precipitaciones de los meses estivales, puede ser el detonante más peligroso en lo que a los incendios forestales respecta.

Por ello, un año más, la Diputación Foral de Álava ha tomado cartas en el asunto. Desde hoy, queda restringida la celebración de barbacoas en la provincia, a excepción de seis puntos que sí que disponen de instalaciones cubiertas en su totalidad y dotadas de paredes y chimenea. Esta norma permanecerá activa hasta mediados de septiembre.

¿Dónde es posible realizarlas?

  • San Roke, en Amurrio
  • La Encina, en Artziniega
  • Santa Ana, en Llodio
  • San Ginés, en Labastida
  • Ostuño, en Izarra
  • Fresnedo, en Santa Cruz de Campezo

El resto de las barbacoas que no tengan autorización expresa del Servicio Foral de Montes quedarán cerradas o precintadas, por lo que su uso quedará totalmente prohibido. Tampoco se podrán utilizar barbacoas portátiles en en el entorno rural.

El uso del fuego también quedará prohibido en los siguientes espacios:

  • Suelo rústico de cualquier clase
  • Montes públicos o de particulares
  • Espacios naturales protegidos
  • Parques provinciales y locales de esparcimiento
  • Áreas de descanso de las carreteras cuyo trazado discurre por el Territorio Histórico de Álava

Barbacoas en casas y chalets

Asimismo, también existen medidas de obligado cumplimiento en las barbacoas de ámbito privado.

  • Asegurarse de tener una distancia horizontal mayor o igual a 3 metros desde la edificación a cualquier combustible susceptible de propagar el fuego.
  • Mantener húmeda la vegetación herbácea próxima a la edificación, durante todo el uso de la misma, a fin de disminuir el riesgo de ignición.
  • Permanecer vigilante y junto al fuego durante todo el tiempo que esté encendido, procediendo a apagarlo rápidamente si surgiera cualquier situación de riesgo.
  • No quemar hojas, papel, combustible fino, etc., cuyas pavesas puedan ser transportadas por la columna de humo. Únicamente se permitirá la utilización de carbón.
  • Recoger siempre las cenizas en frío y depositarlas en recipientes no inflamables. Dichos recipientes no inflamables serán empleados para depositar exclusivamente cenizas y deberán encontrarse en todo momento en disposición de ser usados.
  • No acumular gran cantidad de combustible, añadiéndolo siempre de forma progresiva.
  • Tener agua suficiente o algún medio de extinción eficaz junto a la barbacoa durante todo el tiempo que esté encendida.
  • Asegurarse de que el fuego y las brasas estén totalmente apagados al ausentarse.

De esta manera, quedan así establecidas las condiciones y usos de las barbacoas de cara a este verano. Eso sí, la normativa podrá variar en función de las condiciones climatológicas del día a día, sobre todo cuando la ola de calor sea protagonista.