Marta González Pescador es doctora en Psicología, terapeuta familiar y de pareja acreditada, trabaja como psicóloga clínica en el servicio cántabro de salud y también es asesora externa de PsicoLan, el nuevo servicio de La Fundación San Prudencio. PsicoLan tiene como objetivo proteger y mejorar la salud emocional en el ámbito del trabajo. En esta entrevista ofrece herramientas y soluciones para cuidar y mantener la salud en el trabajo, sincronizando nuestro reloj interno con los horarios laborales.
¿Qué es la cronobiología y cómo afecta a las personas trabajadoras?
La cronobiología es el estudio de cómo la vida, nuestras acciones y emociones, se ven afectadas por el tiempo, en especial por los relojes internos. Nos da claves valiosas para incrementar el rendimiento y optimizar nuestro estado de ánimo y nuestra salud. Hay diferentes actividades en nuestro organismo que se repiten simultáneamente según los ritmos biológicos, que tienen que ver con la rotación de la tierra y se denominan ritmos circadianos. El organismo tiene sus propios ritmos. Si somos capaces de escucharlos y respetarlos, el cuerpo funciona con alto bienestar y rendimiento.
Hablando de cronobiología, ¿cuál sería el mundo ideal y cuál es la situación real que existe en el mundo laboral?
Las respuestas las podemos encontrar en los especialistas, los doctores Sara y Eduard Estivill, en una reciente publicación del método Tokei (2021), que significa reloj en japonés. Nos describen cómo el mundo ideal sucedía en las sociedades agrarias del siglo pasado, en las que la fuerza del trabajo se llevaba al ritmo de la luz y de la oscuridad y también el resto de los hábitos básicos: los patrones de sueño y descanso, de comidas, de ejercicio e, incluso, de relaciones sociales al final del día. ¿Cuál es la situación en el mundo laboral actual? Los horarios y los patrones se llevan conforme al sistema productivo, no al organismo humano. En muchos casos están desincronizados con respecto de nuestro reloj biológico.
"La pérdida de la sincronía con respecto al reloj biológico puede tener graves consecuencias para la salud"
¿Qué consecuencias puede tener para una persona trabajadora no autocuidarse, no tener en cuenta su reloj biológico, su cronotipo y perder el patrón horario de hábitos básicos de sueño y descanso, de comidas, de ejercicio físico y de relaciones?
Tiene consecuencias en su salud. Desde el punto de vista de parámetros fisiológicos, afecta al sistema hormonal y, por lo tanto, a la regulación de los patrones básicos. El no diferenciar entre el día y la noche, si se mantiene a lo largo del tiempo, provoca una afectación seria en la salud si se produce esa cronodisrupción y la pérdida de sintonía con el reloj biológico. Se recomienda que haya una clara diferencia entre la actividad del día y el descanso y el sueño de la noche. También es recomendable ajustarse al propio cronotipo. Esto se refiere al perfil particular de cada persona, que es de carácter psicofisiológico y nacemos con ello. Hay personas que tienen mejor rendimiento y actividad a primeras horas del día, a las que llamamos alondras; otras tienen mejor rendimiento en las últimas horas, a los que llamamos búhos; y el cronotipo intermedio, que son la mayor parte de las personas y supone la mitad de la población, que rinden igualmente a lo largo de todo el día. La pérdida de la sincronía con respecto al reloj biológico puede tener graves consecuencias para la salud. Desde problemas para conciliar el sueño, síntomas inespecíficos de malestar emocional, irritabilidad, ansiedad, sensación general de cansancio y fatiga, falta de ganas y fuerzas, dificultades en concentración y atención o alteraciones metabólicas y hormonales.
Jornadas intensivas excesivamente largas, sin parar, trabajos a turnos con cambios frecuentes, nocturnidad... No parece un escenario acorde con los ritmos biológicos ni con el reloj interno.
Esos escenarios propios de los patrones horarios de la producción industrial no son los ideales para que una persona trabajadora esté en sincronía con los ritmos biológicos y con el reloj interno. Son causas externas que producen desfases horarios. Los cambios de turnos laborales son un ejemplo que puede producir problemas. El turno de noche, trabajar como correturnos o no trabajar acorde al día y la noche según la luz natural afecta. Lo que tenemos que plantear es cómo una persona puede minimizar el impacto de estos cambios y encontrar soluciones ajustadas a su horario laboral y su reloj interno.
"El programa Tu salud-Zure osasuna ofrece desde PsicoLan intervenciones psicológicas ajustadas a medida de la persona trabajadora y, si lo desea, se coordinan con la empresa en el punto de encuentro neutral y confidencial de La Fundación San Prudencio"
¿Qué consecuencias puede sufrir una persona trabajadora que no logra conciliar su reloj interno con sus obligaciones laborales?
Sufrirá en su salud desde el punto de vista físico y emocional. Es importante aceptar que los horarios de trabajo están establecidos, son limitaciones que no se pueden cambiar.Pero sí que es posible que la persona trabajadora encuentre soluciones para adaptarse y reconectar su reloj interno, sincronizándolo con sus turnos y horarios de trabajo, estableciendo una rutina activa saludable en sus hábitos básicos, con un patrón compatible con el horario laboral.
¿Cómo se identifican este tipo de problemas?
Detectando tempranamente síntomas inespecíficos, como cansancio, pérdida de fuerzas y de ganas para llevar el día a día adelante, irritabilidad, insomnio, ansiedad... Es importante intervenir de inmediato, con propuestas sencillas de ajuste en el patrón de hábitos básicos.
¿Cómo trabajan en PsicoLan con este tipo de problemas?
En PsicoLan apostamos por la prevención y desde la primera valoración psicológica revisamos con la persona cómo funciona su reloj biológico, preguntamos cómo planifica sus horarios, exploramos qué le funciona mejor según su cronotipo para animarle a que lo haga más e investigamos qué cambios tiene que hacer en sus autocuidados para optimizar su rendimiento, planificando una rutina activa y saludable con soluciones a su alcance. Son intervenciones breves, basadas en evidencia y focalizadas en soluciones dentro del marco del trabajo. Evaluamos cuál es su problema, las soluciones que la persona haya probado y no funcionan y proponemos soluciones diferentes basadas en el cronotipo y en las pautas que los expertos recomiendan porque han demostrado que tienen eficacia. Estas pautas que funcionan son: empezar el día con luz, hacer ejercicio a primera hora de la mañana y evitarlo a última hora de la tarde, mantener un patrón de comidas, se recomienda una siesta corta y un descanso nocturno de siete a ocho horas preparándose antes para el sueño, con desconexión digital dos horas antes de acostarse. Para los trabajadores a turnos, en PsicoLan se diseña y planifica un horario a medida para encontrar un patrón compatible con los turnos y descansos, minimizando la variación entre horarios y buscando la máxima coincidencia con los ritmos biológicos. Con intervenciones de PsicoLan, en coordinación con la empresa, se han facilitado reducciones de jornada, ajustes horarios para aumentar o disminuir las noches, cambios de horarios temporales para quien se reincorpora de una baja.... El programa Tu salud-Zure osasuna ofrece desde PsicoLan intervenciones psicológicas ajustadas a medida de la persona trabajadora y, si esta lo desea, se coordinan con la empresa en el punto de encuentro neutral y confidencial de La Fundación San Prudencio.
Más información
Si quiere saber más sobre PsicoLan, puede ponerse en contacto con La Fundación San Prudencio en www.lafundacion.com o en el teléfono 945 222 900.
