El programa Un pueblo, una acción por la biodiversidad afronta su segunda edición dirigiendo su acción a la Cuadrilla de Llanada Alavesa y de su entorno, tras cerrar el pasado año la primera experiencia piloto en Gorbeialdea con un balance muy satisfactorio y la participaron de cerca de 700 personas en doce municipios.

El proyecto, liderado por Fundación Vital, Diputación Foral de Álava y el IES de Murgia, busca generar una cultura en favor de la biodiversidad de nuestro ecosistema y gestionar los recursos naturales de manera participativa en localidades del Territorio Histórico de Álava.

La acción se integra en la Alianza Alavesa por el Desarrollo Sostenible 2030 y se centra en el Objetivo de Desarrollo Sostenible 15 (Vida de Ecosistema Terrestre). La convocatoria de cara al 2022 se mantiene abierta para que aquellas entidades locales que deseen participar puedan promover acciones de mejora medioambiental en sus localidades. En el primer trimestre del año, el programa ha recibido ya una docena de propuestas por parte de los municipios de la Cuadrilla.

La presentación de este nuevo proyecto ha tenido lugar este miércoles de la mano de Axier Urresti, director ejecutivo de las Fundaciones Vital, Natividad López de Munain, directora foral de Medio Ambiente y Urbanismo, y Unai Zubia, coordinador del programa del IES de Murguía.

Presentación

El proyecto atiende a estándares internacionales y objetivos de desarrollo sostenible creando alianzas público-privadas para favorecer el cuidado de la naturaleza mediante pequeñas acciones y la divulgación de cada una de ellas. Se trata de actuar localmente para conseguir objetivos a escala global.

Los responsables de la iniciativa han mantenido reuniones en los primeros meses de este año con ocho ayuntamientos de la Llanada Alavesa, en las que han participado 65 representantes de las diversas instituciones implicadas, y tres municipios de otras zonas del Territorio.

La primera de las actividades planteadas para 2022 se ha llevado a cabo ya en La puebla de La barca con la participación de la ikastola Assa, en cuyo recinto se han construido y colocado cuatro cajas nido para diversas especies de aves y murciélagos y un comedero. En ella se han implicado cerca de 30 alumnos y alumnas.

Hasta el momento se ha recibido las siguientes propuestas de diferentes ayuntamientos que se pondrán en marcha a lo largo de este año:

  • Trokoniz: Creación de un colmenar en una parcela de Añua.
  • Egileor: plantación de especies autóctonas en terrenos del pueblo.
  • Alangua: recuperación de una charca que se ha ido cerrando con el paso del tiempo en la que antiguamente se juntaban muchos anfibios.
  • Gaceta: medidas para cuidar y proteger el bosque isla de Gaceta / Promover el Plogging (práctica que combina el ejercicio al aire libre con la recogida de residuos) / Plantación de plantas aromáticas en rincones del municipio
  • Opakua: construcción y colocación de cajas nido en el entorno de pueblo para diferentes tipos de aves. Algunas para rapaces.
  • Luzuriaga: limpieza de escombrera en el entorno del bosque isla de Luzuriaga y plantación de diversas especies de árboles y arbustos en el perímetro de la laguna.
  • Zuazo de San Millán: puesta en valor de unas charcas ubicadas en el entorno del pueblo y colocación de unos bancos o espacios de disfrute de la zona. Plantación de algún árbol y arbusto.
  • Gauna: plantación de aromáticas y propuesta de crear corredores ecológicos entre los pueblos de la zona, rodeados de fincas de cultivos.
  • Agurain: Limpieza y plantación en la zona de Galzar. Actividades con la ikastola.
  • Zalduondo: Limpieza de camino antiguo y puesta en valor de las especies de la zona
  • Narbaja: en Alto de Ariketa, retirada de pequeña y antigua escombrera; en Alto de Arambaz, retirada de pequeña y antigua escombrera; en Prado del molino, limpieza de bosque nuevo plantado por el pueblo en vereda; en Arroyo Presatxo, retirada de antigua captación de agua para consumo del depósito de Barria; refugio o vivero para mariquitas.
  • Baranbio: limpieza de residuos en el río Altube y puesta en valor de las antiguas minas y las especies de la ribera del río.
  • Lapuebla de Labarca: cajas nido.
  • Ollabarre: creación y colocación de cajas nido para aves y murciélagos y charla sobre aves de los entornos urbanos.
  • Guillerna: actividad practica de poda y formación de frutales.

Las tres entidades impulsoras plantean el mantenimiento de la biodiversidad del territorio involucrando a sus vecinos y vecinas a través de experiencias en un medio natural que se puedan compartir. Desde una perspectiva de participación y cercanía a las personas, el proyecto promueve el intercambio generacional y la participación activa de los agentes de cada zona (vecinos/as, centros escolares, asociaciones€), y la recuperación de actividades y oficios en desuso, e incluso patrimonio. Ese intercambio generacional y el conocimiento de las tradiciones son fundamentales para conocer cómo han evolucionado los ecosistemas a lo largo de los años y para recuperar las zonas que puedan estar alteradas por la acción humana.