- El Ayuntamiento de Artziniega ha firmado el contrato de arrendamiento del bar de la Campa de La Encina, como poco, hasta 2024. “La apertura de este local para uso hostelero, tras muchos años cerrado, era uno de nuestros objetivos esta legislatura. Lo abrimos ya en 2021, por unos meses, y el éxito nos ha llevado a licitarlo por dos años”, apunta el alcalde, Joseba Vivanco. En diciembre acabaron las obras de reforma de uno de los dos baños de la campa, además de facilitar la accesibilidad a los mismos eliminando el escalón existente. Ahora, la intención pasa por tratar de reformar el otro baño antes del verano, así como la cubierta del propio bar, y dotar de iluminación exterior a este último.

“Esta mejora de un enclave único y singular como la campa de La Encina se completará en breve con la colocación de una serie de paneles informativos referentes a los árboles que acoge este espacio verde”, adelanta el primer edil que, con todas estas actuaciones, quiere dejar manifiesta la apuesta del Consistorio por poner en valor un lugar privilegiado tanto para residentes en Artziniega, como visitantes. No en vano, se encuentra en el área recreativa del mismo nombre, situada junto al famoso santuario de la patrona local, en cuyas antiguas caballerizas, desde 2009, se ubica el museo de arte sacro del municipio.

Según el pliego de cláusulas de contratación por el que salió a concurso este bar, el precio del alquiler es de un mínimo de 60 euros al mes (sin IVA), y el adjudicatario está obligado a abrirlo al público todos los fines de semana y festivos, en horario de mañana y tarde, del 2 mayo al 15 de octubre, quedando a su criterio tanto la apertura de lunes a viernes como la del resto de los meses del año.

Asimismo, será de cuenta de la persona arrendataria la limpieza de los locales de los aseos ubicados en el edificio contiguo, siempre que esté abierto el servicio de bar, y también serán de su cuenta los productos de limpieza utilizados. El espacio es un establecimiento de categoría 0; es decir, no hay posibilidad de elaborar alimentos, solo servir bebidas y alimentos, teniendo en cuenta que en este grupo se incluyen los establecimientos que exponen y sirven productos elaborados por industrias autorizadas.

En otro orden de cosas, las personas interesadas en las bonificaciones aplicables a los impuestos de bienes inmuebles y de vehículos en este Ayuntamiento, tienen de plazo para presentar sus solicitudes hasta el próximo 28 de febrero. Se trata de un trámite que hay que hacer cada año en las oficinas municipales, y para el que se puede solicitar información en las mismas, así como a través de la página web del Consistorio.

En el caso del IBI, la ordenanza fiscal reguladora contempla bonificaciones del 90% para las viviendas habituales de familias numerosas, con ingresos netos de entre 24.500 y 49.000 euros, en función al número de hijos, su grado de discapacidad o tratarse de familias monoparentales; y de hasta el 50% para los bienes inmuebles cuyo uso sea objeto de cesión en el marco del programa de vivienda vacía del Gobierno Vasco. También pueden ser de la cuota integra del impuesto para los inmuebles de uso exclusivo de vivienda habitual para familias con rentas inferiores a 21.000 euros anuales. Estos tres tipos de bonificaciones son incompatibles entre sí.

Por lo que respecta a vehículos, el descuento es del 30% para utilitarios de cinco o más plazas, cuyo titular sea miembro de una familia numerosa con un solo coche en propiedad, y cuyos ingresos anuales oscilen entre los 24.500 y los 49.000 euros, en función del número de hijos, entre otros requisitos.