La sexta ola ha iniciado una desescalada con un descenso continuado de todos los indicadores epidemiológicos. La mejoría se nota sobre todo en los hospitales que van despejándose de pacientes y ya presentan la ocupación más baja del presente año. Este alivio de la presión asistencial se traduce en que actualmente hay 637 pacientes covid, cuando el 1 de enero había 614 vascos ingresados.

Los pacientes críticos que necesitan ser atendidos en UCI han disminuido hasta 88, confirmando la tendencia a la baja, prácticamente ininterrumpida, desde que el 16 de enero se alcanzara el pico de la sexta ola en número de enfermos graves, con 143 personas en camas UCI. No había menos pacientes covid en Intensivos desde mediados de diciembre del año pasado.

En planta también se ha registrado un importante descenso de pacientes. El miércoles había 549 enfermos covid, también la cifra más baja en un mes. Ese día los ingresos diarios por complicaciones provocadas por el coronavirus fueron 78, muy lejos del centenar que se contabilizaron durante varias jornadas consecutivas del mes de enero.

un 20% menos de contagios

Se consolida así la caída continuada de la curva en Euskadi que mantiene la regresión iniciada a mediados de mes. De hecho, un dato corrobora el retroceso de la pandemia y es que en la última semana, Euskadi ha sumado 28.105 nuevos positivos, prácticamente un 20% menos que la anterior.

Entre los valores más positivos destaca el frenazo en la transmisión de la enfermedad ya que se confirma la caída del número reproductivo básico, el que indica a cuántas personas puede llegar a infectar un enfermo covid. Se sitúa en 0,83, después de que el pasado domingo se llegara al 0,98, rozando el 1, umbral de peligro que indica que la transmisión comunitaria no está controlada.

Este indicador ha descendido en los tres territorios, especialmente en Gipuzkoa donde se había rozado el 1 y se encuentra en 0,82; en Bizkaia y Araba se queda en 0,83.

A lo largo del miércoles Osakidetza realizó casi 11.000 pruebas diagnósticas en las que dieron positivo 3.371 personas, es decir, el 30%. Esta positividad es también la más baja desde el 28 de diciembre, cuando se empezaron a notar los efectos de las Navidades en la extensión de la enfermedad.

La incidencia registra un índice de 2.830 casos por 100.000 habitantes y lleva dos días por debajo de 3.000 casos, algo que tampoco sucedía desde finales del año pasado. Se da la circunstancia de que esta tasa ha dado un frenazo espectacular ya que supone 536 puntos menos que hace una semana.

previsiones optimistas

Las previsiones son buenas ya que el escenario pandémico va a seguir previsiblemente descendiendo dado que la incidencia en 7 días, que indica a más corto plazo cómo va a evolucionar el virus, se sitúa en 1.265 casos por 100.000 habitantes.

La incidencia acumulada marca el mejor dato en Bizkaia, con 2.671 casos, seguido de Araba, con 2.830, y Gipuzkoa, con 3.110 casos. En las capitales también se mantiene el descenso: Bilbao se encuentra en 2.510, Gasteiz en 2.821 y Donostia en 3.001. Además tres localidades salen de la zona roja y aparecen en verde por no presentar positivos en las últimas jornadas. Se trata de los municipios alaveses de Navaridas y Ribera Baja y el vizcaíno de Elantxobe.

Los vascos de entre 30 y 49 años son quienes más se contagian, un total de 1.374 en siete días. Precisamente la incidencia de este colectivo es también la más elevada, y supera los 4.600 casos por cada 100.000 habitantes.