Desde que en marzo de 2020 se desatara la pandemia, el Ejecutivo de Iñigo Urkullu ha sufrido numerosos reveses en los tribunales a sus medidas anticovid. En estos meses, la Sala de lo Contencioso Administrativo, que preside el juez Luis Garrido, ha sido un quebradero de cabeza.
1. Así en el verano de aquel año anuló el decreto que obligaba a cerrar los pubs y discotecas a la 1.30 al no ver demostrado que fueran focos de contagio. Dio la razón a los hosteleros y añadía que los brotes en pubs no eran especialmente significativos.
2. En octubre de 2020, la sala no dio su autorización para limitar las reuniones sociales a seis personas, porque era necesario decretar el estado de alarma o aprobar una ley orgánica que lo permitiera.
3. Uno de los varapalos más importantes fue el referido al cierre de bares en los municipios en zona roja. Con el segundo estado de alarma en vigor, en febrero, reabrió los bares en zona roja, con una incidencia acumulada superior a 500 por 100.000 habitantes. El juez Garrido no vio un riesgo cierto y grave.
4. En mayo de 2021, los tribunales impidieron al Gobierno Vasco establecer limitaciones a la movilidad, a la reunión y toques de queda, al ser derechos fundamentales que escapan del ámbito autonómico.
5. En agosto, el desencuentro se produjo por las mascarillas en la playa. Mientras que la nueva orden del Departamento de Salud dictaba su uso, se remitió a la normativa estatal que solo obliga cuando no se cumpla el metro y medio de distancia. Se argumentó que llevarla no era un perjuicio excesivo, pero que “no dejaba de ser una carga”.
6. En septiembre de 2021, a petición de la Liga, se rechazó el aforo del 30% de Lakua y se subió al 60% del Consejo Interterritorial. Se consideró “obvio” que una recomendación del Consejo no era un peligro para la salud.
7. En noviembre, el TSJPV tumbó aunque luego el Tribunal Supremo corrigió esta decisión y autorizó su extensión.