La semana pasada Euskadi registró los peores datos de letalidad del último año ya que se trata de una de las semanas con más decesos. Así, en los últimos siete días se notificaron 108 fallecimientos de personas con covid en Euskadi, de ellos 78 tenían como causa directa el virus.
Entre ellos, un niño menor de nueve años y también una persona de treinta. Se trata del segundo menor que fallece, aunque el Servicio vasco de Salud no facilita más detalles y no concreta ninguna otra circunstancia. En diciembre de 2020, el Departamento de Salud confirmó el óbito de otro niño de Sopela, infectado con coronavirus, que sufría dolencias previas que influyeron en su fallecimiento.
Esta elevada mortalidad choca frontalmente con la bajada en las tasas de incidencia y de positividad como consecuencia del cambio en los protocolos de recuento. En los hospitales, sin embargo, estos centros acusan la alta transmisibilidad que hay del virus porque las UCI marcan un nuevo récord con 143 pacientes que tienen que ser tratados en Intensivos.
El menor número de positivos contabilizados en las últimas horas, un total de 3.806, refleja el cambio en el protocolo de detección de casos anunciado la pasada semana, por lo que estas cifras pueden distorsionar la realidad. De hecho, se ha pasado de realizar 23.000 pruebas diagnósticas el pasado jueves a las 9.000 analíticas de las últimas horas.
No hay que olvidar que en alguna jornada de Navidad se han llegado a notificar incluso 14.000 contagios en un solo día. Pero Osakidetza solo verifica ahora con pruebas los positivos en test de antígenos de farmacia de las personas con síntomas graves, así como los colectivos vulnerables; mayores, embarazadas, personas inmunodeprimidas, y trabajadores que precisen de baja laboral.
Con la modificación de rastreo de casos covid, los contagios han caído un 23% en Euskadi. De esta manera, se ha pasado de 77.628 positivos a 55.534. Con el cambio de protocolos también cae la transmisión, así el domingo 9 de enero la tasa de positividad estaba en el 41%, el pico conocido de esta sexta ola, y siete días más tarde se sitúa en el 38%.
Y es que desde el pasado lunes, no existe la obligación de notificar a las autoridades sanitarias el resultado de un test de farmacia positivo, salvo que se necesite una baja o sea un colectivo de riesgo. Osakidetza tampoco hace ya pruebas diagnósticas a los contactos estrechos salvo a ciudadanos que sufran otras patologías más serias.
Un 56% más de fallecidos
Sin embargo, el número de fallecidos semanales que Osakidetza certifica porque han muerto a causa directamente del coronavirus no deja de escalar. Ha alcanzado los 78, un 56% más que los contabilizados la semana anterior, cuando fueron 50, y se trata del mayor número de esta sexta ola. Hay que retrotraerse a febrero de 2021 para ver una cifra más elevada.
Entre las personas fallecidas en la última semana hay un menor de entre 0 y 9 años, aunque en el boletín no se precisa si el coronavirus ha sido la causa definitiva del deceso.
La imagen más fiable se encuentra ahora en los hospitales que acusan el elevadísimo número de infecciones por la Navidad. El domingo se produjo el pico de personas ingresadas en las UCI de la sexta ola, con 143 enfermos graves, la mayor cifra desde mayo. Además, en planta había 780 pacientes con complicaciones. La progresión de hospitalizados es exponencial y, siempre hay un decalaje entre contagios e ingresos. Por eso el día 3 había 567 personas en planta y 132 en Intensivos y ahora, sin embargo, hay 932 pacientes ingresados con covid.
¿El principio del fin?
En otro orden de cosas, el virólogo Raúl Ortiz de Lejarazu consideró ayer en declaraciones a Onda Vasca que la llegada de ómicron sí puede ser considerada el principio del fin. Vaticinó que la bajada tardará “ocho semanas o nueve”. No tiene dudas de que con ómicron se ha producido “un salto genético” y que la evidencia ha demostrado que sus efectos no son tan graves como los de las variantes anteriores pero pide no bajar la guardia.
El virólogo comparte la idea de que se prepare al sistema para que lleve a cabo una vigilancia como la de la gripe pero, apunta, “cuando deba hacerse, sin desvestir ningún santo”. Y pone dos condiciones para llegar a ese escenario. Por un lado, que se haga con “consenso internacional”; y por otro, que se lleve a cabo cuando venzamos a la sexta ola.
listas de espera
19.327 pacientes esperan cirugía
Osakidetza. Según el análisis del Defensor del Paciente y, en cuanto a la lista de espera quirúrgica, Osakidetza arroja los mejores datos de todo el Servicio Nacional de Salud, con un volumen de 19.327 pacientes que esperan algún tipo de cirugía (la quinta comunidad con menos lista) y una tardanza que ronda los 62 días, la menor de toda España. El servicio de Traumatología es el que acumula mayor retraso, seguido de Urología y Otorrinolaringología.
Denuncias. El Defensor del paciente detalla que en Euskadi se presentaron 410 denuncias contra el sistema sanitario, de las cuales 30 tuvieron como consecuencia el fallecimiento del paciente. De ellas, 246 se formularon en Bizkaia, 125 en Gipuzkoa y 39 en Araba. Los hospitales más denunciados fueron los de Cruces, Donostia, Galdakao, Basurto y el Hospital Universitario de Álava. Con respecto a 2020 las denuncias aumentaron en 93, un 22% más.