La celebración del 60 aniversario de la Fundación Estadio ha llegado este viernes a su fin con la plantación en sus instalaciones de un retoño del árbol de Gernika y la colocación de un mural conmemorativo.
En la plaza Ágora, el retoño de este ejemplar que simboliza las libertades de Euskadi, ha sido plantado por el presidente de las Fundaciones Vital, Jon Urresti, la presidenta de las Juntas Generales de Bizkaia, Ana Otadui, y su homólogo en Álava, Pedro Elósegui, y el portavoz del Gobierno Vasco, Bingen Zupiria.
Otras autoridades que no han dudado en coger la pala han sido el diputado general de Álava, Ramiro González, el alcalde de Vitoria, Gorka Urtaran, y José Ángel López de Lacalle, en representación de los empleados de la Fundación Estadio, así como Teresa Bresa, en representación de sus cerca de 20.000 abonados.
El acto también ha contado con el director de la Fundación Estadio, Mikel Urdangarin, su vicepresidente, Fernando Raposo, y otros miembros del patronato de la entidad.
También se esperaba la asistencia del lehendakari, Iñigo Urkullu, quien finalmente se ha visto obligado a cancelar su presencia tras la prolongación de la reunión del LABI y teniendo en cuenta que al mediodía comparecía ante los medios para dar cuenta de las decisiones que había tomado la mesa que gestiona crisis sanitaria en Euskadi.
A continuación, se ha presentado el mural Gernikako Site, situado bajo la cafetería, y que ha creado el artista alavés Pedro María Moraza con motivo de los 60 años de la entidad. Como ha explicado, su obra es una “alegoría del pueblo vasco y sus valores” y ha querido homenajear a los orígenes ancestrales, representados por el árbol de Gernika. La creación también tiene claras referencias al Gernika de Picasso, para simbolizar “la superación del sufrimiento causado por el inhumano bombardeo de esta simbólica villa” y para reivindicar “que a ver si nos traen por fin a Euskadi esta obra”.
Tras ello, todos se han hecho una foto de familia en el interior de las instalaciones.Historia
HistoriaEl origen de la Fundación Estadio Vital Fundazioa, denominada como tal desde junio de 1991, se remonta a los finales de los años cincuenta del pasado siglo. El 26 de febrero de 1957 la Caja Provincial de Álava tomó la decisión de construir una de las más modernas instalaciones polideportivas del Estado.
Lo hizo en el Paseo de Cervantes, en la zona sur de Vitoria-Gasteiz, un distrito que se ha transformado con los años en un ejemplo en cuanto a equipamientos y servicios deportivos se refiere.
Oficialmente, las instalaciones de la Fundación Estadio se inauguraron el 24 de abril de 1960. Desde aquella fecha, y hasta la actualidad, presta con constantes renovaciones y puestas al día servicios para todos los practicantes y amantes de la cultura deportiva, sea cual sea la edad y las inquietudes de sus usuarios.
De esta manera, a la piscina olímpica con su característico trampolín, “un emblema pionero”, le han seguido otros proyectos a partir de la primera ampliación moderna del Estadio, con la adquisición de nuevos terrenos en 1972.
Así, hoy el Estadio, como lo conocen sus usuarios, se ha convertido en “uno de los principales lugares de socialización de la ciudad durante estos 60 años”, como destaca Urresti.
Es un complejo deportivo y social de 40.000 m2 que cuenta con amplias instalaciones y servicios para el deporte y la actividad física como piscinas -cubiertas y descubiertas-, gimnasios y salas polivalentes, fitness, saunas y baños de vapor, masaje, ludoteca, boulder, tenis de mesa, frontones -cubiertos y descubiertos-, campo de fútbol 7, pistas de tenis -cubiertas y descubiertas-, de squash, de pádel -cubiertas y descubiertas-, de baloncesto, petancas, juegos infantiles y amplias zonas verdes.
Completa su oferta con el Aula Estadio, un espacio que acoge conferencias y coloquios sobre múltiples temas relacionados con el deporte.