- La ampliación del metro ligero para dar servicio a los vecinos del barrio de Salburua empieza a ser ya visible en una de las arterias del gran barrio del este de Gasteiz. Desde hace tres semanas el tráfico rodado por Bulevar de Salburua se ha convertido en un gran embudo a la hora de circular desde la rotonda del Paseo de la Ilíada, tras cruzar el paso subterráneo bajo el ferrocarril hasta la siguiente glorieta en Avenida de Bruselas, poniendo a prueba el nivel de paciencia de los conductores. Se llega a este punto después de circular por un primer tramo de Bulevar de Salburua con tres carriles en cada sentido, desde Venta de la Estrella, o quienes descienden por Paseo de la Ilíada. Esa rotonda donde confluyen las dos calles, junto al nuevo centro educativo, emerge como la boca del embudo donde aflora un punto negro del tráfico en Gasteiz.
El tránsito por una amplia avenida, que contaba con tres carriles de tráfico, se ve reducido ahora a solo uno y obliga a los conductores a circular en una hilera de vehículos durante los más de 600 metros que discurren desde la rotonda de la Ilíada hasta la de la Avenida de Bruselas, junto al centro comercial. La arteria ha perdido la fluidez de circulación de épocas pasadas y se ha convertido en una desesperante procesión a reducida velocidad, trufada de semáforos y pasos peatonales con badenes, que merma la paciencia de los conductores.
El colapso y las retenciones se hacen especialmente visibles a primera hora de la mañana, a partir de las 8.30 horas, y también a mediodía. En esos periodos Bulevar de Salburua se convierte en una caravana de coches durante gran parte de esos 600 metros entre una y otra rotonda. Este amplio bulevar es una zona de paso casi obligatorio para los conductores que vienen desde la zona sur de la ciudad, Adurza o Iturritxu, y quieren trasladarse hacia el norte, a barrios como el de Zaramaga, el gran centro comercial o la factoría de la multinacional Michelin.
La ralentización en el tráfico de paso por la calle y la tela de araña en la que ahora se ha convertido, está empezando a calar entre los conductores para situar como punto negro en su radar a Bulevar de Salburua. Son muchos los que han empezado a buscar otras opciones para esquivar esta arteria con calles alternativas de paso. Ese rastreo de vías hace que algunas zonas, hasta ahora con escaso volumen de circulación, empiecen a tener una mayor paso de coches. Es frecuente que algunos avezados pilotos opten por adentrarse en la rotonda de la Ilíada, donde se genera el colapso, y desde allí avanzan de una manera mucho más fluida por la calle del mismo nombre o Nadine Gordimer hasta alcanzar de nuevo Bulevar de Salburua superada la rotonda de Avenida Bruselas.
Los trabajos actualmente en ejecución consisten en "construir el vial que suple a la zona donde luego va a ir la plataforma del tranvía y desplazar la zona de la calzada hacia el lado este de la calle", explican técnicamente desde Euskal Trenbide Sarea (ETS) a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA sobre el alcance de unas obras ya a pleno rendimiento. Junto a ese desplazamiento de la calle, se aprovecha ahora para hacer el desvío de servicios como canalizaciones y conducciones que se verán afectadas por el paso del tranvía. El nuevo aspecto de la calle quedará con dos carriles de circulación por sentido, con una hilera de estacionamientos incluida en ambos. Se generará la creación de un bidegorri, que como ya sucede en el nuevo tranvía al sur, discurrirá paralelo y pegado a la traza del recorrido del tranvía.
Una vez finalizado este desplazamiento hacia el este de la configuración de la calle, se acometerán las obras propias para abrir el camino al gusano verde por esa zona de Salburua. El proyecto contempla que los convoyes circulen por la actual acera oeste, la de los números pares, durante 645 metros y tenga dos paradas, bautizadas ya como Nikosia y La Unión.
Un único carril. Una vez atravesado el paso bajo las vías del ferrocarril, en la rotonda de la confluencia con Paseo de la Ilíada y Bulevar de Salburua, el tráfico pasa de tres carriles a convertirse en una lenta y parsimoniosa caravana a reducida velocidad hasta alcanzar la siguiente glorieta de Avenida de Bruselas.
Tráfico lento y atascos. La circulación se realiza a muy baja velocidad en un tramo de unos 600 metros por Bulevar de Salburua. Se generan atascos en diferentes momentos del día como a primera hora de la mañana, alrededor de las 8.30 horas, y también a mediodía. El resto de la jornada la circulación es también poco fluida por la presencia de los semáforos y pasos elevados de peatones.
Otras alternativas. A la vista de lo complicado que resulta atravesar ese tramo de la calle, hay conductores que empiezan a buscar otras calles por las que circular y evitar esos colapsos. La propia calle Paseo de la Ilíada y Nadine Gordimer empiezan a reflejar un incremento de paso.
Reubicación de los radares.
Las dos cajas de radar situadas en Bulevar de Salburua se han retirado con motivo de las obras y se han colocado en Iturritxu.
Auzogune el jueves. El próximo jueves se celebrará un auzogune con los vecinos del barrio en el que el concejal de Movilidad, Raimundo Ruiz de Escudero, planteará las alternativas posibles para mitigar los problemas de tráfico que generan las obras del tranvía en la zona de Santo Tomás y el Parque del Este.