vitoria - El lehendakari, Iñigo Urkullu, aseguró ayer que su ejecutivo seguirá adoptando medidas porque "el impacto humano, social y económico" de la crisis del coronavirus "va a ser muy elevado" y animó a la ciudadanía a cumplir estrictamente las recomendaciones. Además, emplazó a hacer un uso "responsable" del material sanitario porque "vienen momentos de mayor necesidad de atención" a pacientes y se va a prolongar en el tiempo.

Urkullu apeló de esta forma a la ciudadanía durante la reunión del comité asesor que le asiste como director único del plan de protección civil de Euskadi (LABI), celebrada Vitoria. Durante su intervención, recordó que esta mesa se constituyó el 14 de marzo para la colaboración interinstitucional en Euskadi. Hasta ese momento, se habían tomado las primeras medidas para evitar la propagación del virus y reducir el nivel de contagios. El foco estaba entonces puesto sobre todo en Álava, territorio en el que se habían tomado medidas como la suspensión de clases y el cierre de colegios.

El presidente del Gobierno Vasco subrayó que, desde la creación de este foro, "han pasado solo seis días muy intensos, difíciles y, también, dolorosos, días de decisiones". En este sentido, resaltó que se declaró la emergencia sanitaria, se aprobó el plan de protección civil de Euskadi y se ampliaron las medidas de control social, mientras que el Gobierno español decretó el estado de alarma.

En todo este tiempo, han sido las autoridades sanitarias "quienes han marcado el camino" y lo van a seguir haciendo. Iñigo Urkullu recordó que "esta situación se va a prolongar durante semanas, y el impacto humano, social y económico va a ser muy elevado. Queda por delante la parte más dura: las consecuencias personales de la pandemia. Tenemos que garantizar la atención sanitaria y los servicios esenciales, al tiempo que, en la medida de lo posible, conservemos la actividad económica y el empleo".

El lehendakari también quiso afirmar que, en este contexto, hay que ser "responsables y estrictos en el cumplimiento de las medidas. Además, debemos ser especialmente sensibles para atender todas las situaciones de necesidad que van a vivir las familias, las personas y también las empresas".

A su juicio, "hasta ahora la sociedad vasca ha estado a la altura de las circunstancias ante la gravedad de esta amenaza global. Contamos con recursos y con profesionales solventes. La coordinación institucional está siendo buena y la colaboración público-privada vuele a manifestarse como un valor en nuestro país", señaló. Por ello, animó a "seguir por esta senda con toda determinación, ofreciendo respuestas en tres ámbitos fundamentales". El primero hace referencia a compartir la información disponible y las prioridades de cada momento.

En esta línea, señaló que, "tanto Osakidetza como la Ertzaintza están demostrando que son dos pilares básicos y que cuentan con una gran calidad profesional y pleno compromiso con el país". Su reto -explicó- es garantizar el suministro de recursos médicos para seguir prestando la atención. "Estos últimos días estamos haciendo un llamamiento para que la utilización de este material siga siendo responsable porque vienen momentos de mayor necesidad de atención y se van a prolongar en el tiempo", indicó. Destacó así las cinco prioridades del ámbito sanitario, como la anticipación en la adquisición de material fungible para personal sanitario, especialmente EPI y respiradores, y para residencias, transporte sanitario y atención domiciliaria municipal.

También pondrán especial importancia en la atención sociosanitaria en los espacios residenciales en coordinación con las Diputaciones Forales, desarrollarán el plan de unidades de cuidados intensivos en los hospitales, intensificarán la atención a colectivos de especial consideración (salud mental, centros penitenciarios y centros de menores), y ofrecerán apoyo al estado de salud y anímico de los profesionales de Osakidetza.

El segundo ámbito citado por Urkullu hace referencia a concretar y coordinar las medidas de atención social. "Las Administraciones tenemos el deber de garantizar las necesidades básicas a la sociedad. Remarco una prioridad: la atención a las personas mayores, las más débiles".

En esta línea, aseguró que "la solidaridad y la sensibilidad social es un activo de Euskadi. Contamos con un sistema de protección social avanzado y consolidado, tenemos la renta de garantía de ingresos y las ayudas de emergencia social, hemos ampliado la capacidad presupuestaria y tenemos que trabajar de forma coordinada para ofrecer respuestas a las personas que más lo necesitan", resaltó.

El tercer ámbito es el de activar todas las medidas de carácter económico. "Comenzamos ya a conocer las previsibles consecuencias sociales y económicas de esta crisis. Debemos proteger a las empresas. Nos enfrentamos a escenarios inéditos. Hoy hay miles de familias con una gran incertidumbre sobre su futuro, su comercio, su actividad, su empleo", añadió. En esta línea, mostró su preocupación por "la destrucción de capacidad económica" que va a generar esta crisis en los pequeños comercios, profesionales, autónomos, los talleres, así como en las pequeñas, medianas y grandes empresas. Aludió a "medidas de urgencia, aplicadas con cercanía y agilidad, dirigidas a paliar las consecuencias de esta situación, a mantener en la medida de lo posible la actividad productiva y económica de nuestro país". Asimismo, concluyó recordando que "nos corresponde activar todas las medidas que garanticen el presente y preserven el futuro del tejido económico de Euskadi".

"Hoy hay miles de familias vascas con una gran incertidumbre sobre su futuro, su comercio, su empleo"

"Tanto Osakidetza como la Ertzaintza están demostrando ser dos pilares básicos"

Lehendakari

"Empezamos a conocer ahora las consecuencias sociales y económicas de esta crisis sanitaria"