Vitoria - Las largas vacaciones de Navidad que han tenido la suerte de disfrutar cerca de 60.000 alumnos (59.759) que Álava tiene en etapas no universitarias, finalizan hoy para todos los centros que ayer decidieron que no fuera lectivo para tener 24 horas más para disfrutar de los regalos de Reyes. Así, si ayer regresaron a las aulas centros como Mercedarias (Zaramaga) o San Viator, durante esta jornada le toca a los de San Prudencio, Urkide o Marias, entre otros. "Hay centros de la concertada que empiezan el 7 y otros el 8, pero en la pública casi todos empiezan el 7, después de haber presentado diferentes opciones en los consejos escolares, tanto del claustro, como de la familia, y aceptarla por votación", aclara Lurdes Errasti, presidenta de Denon Eskola.
Sea como fuere, las caras serán menos largas en unos 450 estudiantes de Infantil y Primaria. Se trata, en concreto, de todos los que hoy, desde las nueve de la mañana, tendrán la suerte de estrenar Errekabarri, el segundo colegio público del barrio de Salburua, fecha que anunció DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, en su edición del pasado 19 de diciembre, por lo que se cumple así la promesa de Educación de que empezaría a funcionar durante el curso 2019/2020,
Y es que, como resalta Lorena Laorden, portavoz de la asociación de padres y madres, las ganas por inaugurarlo no faltan entre los padres y txikis, teniendo en cuenta los viajes que han tenido que hacer en autobús, con treinta minutos de ida y otros tanto de vuelta, para ir y volver al antiguo centro de Cándido Ruiz de Garibay. Un colegio provisional, en Zaramaga, al que acudían desde el curso 2013, momento en el que el Gobierno Vasco decidió abrir la matriculación ante la imparable demanda de plazas educativas en Salburua. Por esta razón y desde ese año se habilitó Cándido Ruiz de Garibay como ikastola provisional.
Un largo periplo que concluyó el pasado día 20, el último que los niños se subieron al bus para ir a estudiar a Zaramaga, al coger las vacaciones de Navidad. "El niño que empezó el curso en Errekabarri en 2013/2014 y ha sido transportado en autobús, ha invertido 1.122 horas (46 días)", tal y como dejó constancia ese mismo día en redes sociales la cuenta de Twitter de Salburua colegio. Dicha red social también se hizo ayer eco de que cómo estaba el centro, "a menos de 24 horas para abrir sus puertas: mochila, almuerzo y casco de obra. Esto es lo que van a necesitar los niños de Errekabarri", lamentaba en tono irónico.
La propia Laorden desconocía también con qué se podían encontrar los escolares cuando inauguren el colegio, teniendo en cuenta que todavía hay máquinas trabajando, tras los retrasos por las lluvias constantes de noviembre. "De momento, no sé nada. Hoy tenía que hablar con la directora sobre unas cosas que teníamos que aclarar porque no sé cómo les ha ido en Navidad", respondía así la portavoz de la Ampa de Errekabarri a la pregunta que al respecto le hizo este diario.
También queda pendiente de completar el patio inclusivo, tal y como deseaban los progenitores. Para personalizarlo a su gusto se creó un grupo de trabajo en la asociación de padres y madres, denominado Errekabarri jolasgunea, con toda la comunidad educativa. Como detalla una de sus integrantes, Haizea Miranda, "cuando nos presentaron el proyecto vimos que se habían diseñado tres canchas y surgió una preocupación sobre esta zona cementada. Contactamos con el Gobierno Vasco para ver si se podía cambiar y nos dijeron que sí porque lo queremos más naturalizado y coeducativo. Mañana (por hoy), cuando lo estrenemos, simplemente va a tener tierra. Está sembrada la hierba, pero no la vamos a poder pisar hasta la primera siega, en marzo. Queremos un patio, donde se convierta en un aula más y que sea un espacio de aprendizaje, con juego libre enre materiales naturales y que se fundamente en comportamientos igualitarios. Y también va a tener un espacio cementado para el juego libre".