vitoria - Las vacaciones de verano tocaron ayer a su fin para miles de alumnos alaveses, que volvieron a madrugar y dirigirse a sus ikastolas, colegios o centros de Formación Profesional (FP) con las mochilas y las pilas cargadas para iniciar un nuevo curso. Una vuelta al cole escalonada, que se extenderá incluso hasta la semana que viene en algunos centros concertados, y que dejó las habituales escenas de alegría propias de los reencuentros y de tristeza por el fin del descanso estival.
Uno de los centros de Educación Infantil y Primaria (CEIP) más veteranos de la red pública gasteiztarra, el Ángel Ganivet, sirvió de escenario para dar el pistoletazo de salida oficial a un curso 2017/18 que estará marcado un año más en la CAV por el crecimiento del modelo D, cuyas asignaturas -salvo la lengua castellana- se imparten integrante en euskera. Y Álava no va a ser una excepción.
Según los datos aportados por el Departamento de Educación, de los 55.202 alumnos alaveses que se han prematriculado en Educación Infantil -contando sólo los de tres a cinco años-, Primaria, ESO, Bachillerato y FP, un 49,7% lo ha hecho en el modelo D, 27.443. Supone 1,3 puntos más que el curso pasado y prácticamente rebasar la barrera del 50% por primera vez en su historia. El territorio sigue quedando todavía muy lejos, eso sí, de Gipuzkoa (81,3% del alumnado en modelo D), y algo menos de Bizkaia (60,6%). Del resto, 16.527 chavales (29,9%) estudiarán en el modelo B -mixto- y 11.232 en el A, sólo con la asignatura de euskera, lo que supone el 20,3%. Se consolida también la progresiva caída de esta modalidad educativa en el territorio, que el año pasado cursaba el 21,4% del alumnado y sigue manteniendo el pulso gracias al Bachillerato (41,2% de los alumnos en modelo A) y la FP (83%). En Educación Infantil de tres a cinco años, los modelos D y B aglutinarán ya este curso en Álava al 96,3% del alumnado.
“Seguimos la tendencia de años anteriores”, destacó en este sentido la consejera vasca de Educación, Cristina Uriarte, acompañada ayer en la visita al centro por parte de su equipo y el alcalde de Vitoria, Gorka Urtaran. Aunque sin escasas variaciones, la red pública alavesa ensancha su distancia respecto a la privada (57,3% del total de alumnos matriculados frente al 42,7%), aunque ambas ganan alumnos -1.108 en total- respecto al curso pasado. Únicamente descienden en números absolutos las matrículas en Infantil, 225 menos de cero a cinco años respecto al año anterior, una consecuencia más de la caída de la natalidad. Como buena noticia, Uriarte confirmó que “a lo largo de los próximos meses” concluirán por fin las obras del instituto de Zabalgana, que será la próxima infraestructura educativa pública en abrir sus puertas en la capital alavesa. Las siguientes, aunque la consejera no se refirió ayer a ellas, serán los CEIP Errekabarri y Aldaialde, y más adelante el futuro instituto de Salburua.
nuevos planes... y ope De cara al recién iniciado curso, Uriarte se marcó como objetivo prioritario la firma de un nuevo pacto educativo que “estructure y refuerce la estabilidad y la calidad” de la Educación vasca y reiteró su “voluntad” de convocar nuevas Ofertas Públicas de Empleo (OPE) todos los años durante esta legislatura. La siguiente será en el verano de 2018, aunque el número de plazas no se conocerá hasta Navidad debido a las restricciones que impone el gobierno central. “Vamos a seguir trabajando por que haya un número óptimo de alumnos en las aulas y por estabilizar al profesorado”, prometió Uriarte, que confirmó que las 74 personas que obtuvieron plaza en la última OPE se han incorporado ya a sus puestos.
Dos novedades más que traerá de la mano el nuevo curso será la implantación progresiva de un plan lector en todos los centros de Primaria para potenciar la compresión lectora del alumnado y del novedoso programa contra el acoso escolar Bizikasi, de aquí al curso 2019/20. “Ya no vale decir que son cosas de niños”, remarcó la titular educativa. Uriarte defendió también las medidas implantadas en el marco del II Plan de Atención al Alumnado Inmigrante, aunque avanzar hacia el final de la guetización de distintos centros de la red gasteiztarra seguirá siendo este año otro complicado reto para su área.