- En agosto, el número de establecimientos hosteleros en Gasteiz es limitado, ya que pocos son los locales que siguen con la persiana abierta este mes. Concretamente, los locales del centro urbano reciben consumidores desconocidos al resto del año, como es el caso de los turistas. Atrás queda el periodo de fiestas patronales, cuando la afluencia de clientes es incomparable al resto del año. La tendencia hostelera durante la segunda mitad de agosto, es bien diferente, mucho más tranquila de la situación vivida a lo largo de La Blanca.
Estos días los únicos clientes potenciales son, además de los pocos gasteiztarras residentes en Vitoria, los turistas. Y es que los hosteleros de la capital alavesa afirman que las visitas de los viajeros va en aumento, o por lo menos, así lo notan ellos en la actividad de sus establecimientos. Los procedentes del resto del Estado solicitan tanto el tradicional menú del día como los autóctonos pintxos. Los visitantes extranjeros, en cambio, se decantan mayoritariamente por esta última opción.
Así lo afirma María José Guaita, cocinera de PerretxiCo, establecimiento hostelero instalado en la calle San Antonio, en los alrededores del Parlamento. “Los turistas extranjeros vienen a pedir pintxos sobre todo, algo de consumo rápido”. Detalla que este verano el perfil de cliente potencial proviene especialmente de Francia, aunque también abundan catalanes y alemanes. La empleada de este local argumenta que esta inmediatez tiene su razón en que su horario de cenas es más temprano, y quieren una comida rápida para que puedan acostarse pronto. Asimismo, califica la situación de agosto como “bastante buena”, un panorama similar a otros años. En cualquier caso, reconoce que los establecimientos de alrededor están cerrados por vacaciones, y este factor, evidentemente, les beneficia. La cocinera recuerda que el ritmo frenético que vivieron durante La Blanca, y a pesar de que la rutina estos días es de “tranquilidad”, la actividad hostelera continúa en funcionamiento.
Las puertas del bar El 7 también siguen abiertas. Su propietaria, Milagros Tejado, reconoce que la “avalancha” de gente que tuvieron en fiestas es historia, aunque siguen ofreciendo sus productos. Los menús, cafés, pintxos y bocadillos se siguen sirviendo en este espacioso local situado en la calle Cuchillería. Teniendo en cuenta esta estratégica ubicación, no es de extrañar encontrarse con forasteros pidiendo refrescarse o algo para picar. Tejado detalla que los visitantes que más atiende son catalanes y madrileños.
También Roberto Sáez de la Fuente, camarero del bar Deportivo Alavés nota el incremento de turistas en Gasteiz. Esta taberna se encuentra en una localización en pleno centro de Vitoria, entre la plaza Nueva y la de la Virgen Blanca. Desde aquí contempla los vaivenes de turistas que se acercan a esta ubicación albiazul. Además de catalanes, Sáez de la Fuente destaca también la presencia de andaluces. En cualquier caso, reconoce que tanto galos como otros ciudadanos europeos provocan el cambio de ajetreo laboral, puesto que comen antes que nosotros, tanto al mediodía como a la noche.
Más alejada del centro urbano está la cafetería Madison, localizada en la Avenida de Gasteiz. Tania, una de las camareras, opina que “otros años se nota el bajón estas fechas, pero en 2017 no”. En este sentido, adelanta que el cartel de “cerrado por vacaciones” no lo colocarán en el local. “Pensamos que la hostelería y los comercios tienen que estar abiertos durante todo el año”, argumenta. Además, la trabajadora declara que ocasionalmente reciben turistas, reconocibles porque “vienen hablando en catalán”.
Más pesimista se muestra Jesús, propietario del bar Tito’s, ubicado en Sancho el Sabio. A media mañana, un único cliente disfruta de una consumición en el interior, mientras que en la terraza tan sólo una silla está ocupada. “A eso de las dos de la tarde más gente se animará, aunque sólo un poco más”, afirma. Desde su punto de vista, la diferencia con el año pasado es considerable, puesto que este año “apenas hay movimiento en comparación con 2016”, y tampoco recibe visitas de turistas. A raíz de esta situación, el hostelero confiesa que espera que las cosas remonten el próximo mes.
Queda por comprobar cómo cerrará agosto la hostelería céntrica vitoriana. Lo que queda en evidencia es que la fotografía que ofrecen los locales en Gasteiz es bien diferente a la del resto del año. Dentro de la limitada actividad hostelera, se da uso a las terrazas y parte de la clientela habla en otras lenguas. Aun así, queda en evidencia que los locales más céntricos son los que reciben mayor afluencia de clientes.
Turismo. Es el sustento de la hostelería gasteiztarra durante el mes agosto. Atrás quedan las fiestas, cuando la ciudad estuvo llena. No obstante, la capital alavesa queda desierta una vez sube Celedón. Posteriormente, los turistas son quienes toman el mando de la actividad hostelera.
Pintxos. Es la principal atracción de los establecimientos hosteleros. Lo es para los vitorianos durante todo el año, pero en esta época los visitantes frecuentan los locales en busca de estos pequeños manjares vascos.