Amurrio - Las hermanas Marta e Isabel García de Amurrio, ayudadas por otro sinfín de tejedoras voluntarias, como Isabel Castro, Janire Larrazabal y Ana María Rodríguez, han convertido su tienda de lanas de la calle Aiala en uno de los puntos de recogida del movimiento europeo Pulpitos solidarios. Una iniciativa que comenzó su andadura en Dinamarca en 2013 y se ha extendido ya por buena parte de Europa e incluso América, y que consiste en crear peluches de crochet con forma de octópodos que se envían a hospitales para mejorar la calidad de vida de los bebés prematuros que permanecen en incubadoras.

Y es que, por las numerosas ecografías hechas a bebés se sabe que, durante el embarazo, son muchas las ocasiones en que el feto se topa con el cordón umbilical, lo toca e incluso lo sujeta entre sus dedos. Al nacer prematuros deben despedirse de su cordón antes de tiempo, de modo que ponerle un pulpo de ganchillo con sus ocho patas no es más que una manera de darle de nuevo un cordón al que aferrarse en algunos momentos, tranquilizando así a los bebés. “No lo decimos nosotras, hay estudios que demuestran que los pulpos tejidos con la técnica amigurumi son capaces de aportar grandes beneficios a estos bebés, tales como mejora de la respiración y un ritmo cardíaco mas regulares, así como mayores niveles de oxígeno en la sangre. Los bebés que abrazan un pulpo también son menos propensos a tratar de quitarse sus tubos y monitor”, explica García que, ayer mismo, remitió a Tudela “la primera tanda de 25 pulpitos que llevamos recogidos para que, tras pasar los rigurosos controles, los distribuyan a los hospitales que colaboran con este proyecto”, subraya.

Nueva delegación en Álava Y es que, en Tudela está la coordinadora de la zona norte de España, aunque se está poniendo en marcha una delegación de esta red de pulperas solidarias en Álava. “En Tudela los criban para ver si cumplen con las medidas y materiales establecidos, antes de higienizarlos y empaquetarlos de forma individualizada. No obstante, los que no cumplen los requisitos no se desechan sino que se entregan en otras plantas infantiles de los hospitales, como puede ser Oncología, a través de la asociación Tejiendo sonrisas”, apunta García. Estas amurrioarras comenzaron a colaborar con esta causa hace poco más de un mes. “Nos remitieron a la tienda un whatsapp avisándonos del proyecto desde otros grupos de tejedoras de toda España, pero no nos pusimos en serio a buscar información por Internet hasta que vimos anunciar la campaña en un informativo de la televisión y decidimos sumarnos, no sólo a tejer pulpitos, sino a ser punto de recogida”, explican quienes han involucrado en el proyecto hasta al alumnado del taller de ganchillo que imparte el Ayuntamiento. “El primero cuesta sacarlo un montón, hasta que le pillas las medidas, luego van solos, aunque calculamos que cada pulpito lleva en torno a cuatro horas de trabajo y eso controlando la técnica, pero es muy entretenido”, apuntan.

semanas de gestación. O menos tienen al nacer de forma prematura uno de cada diez niños en Euskadi.

gramos. Pesa al nacer un 15% de los bebés prematuros.

hospitales. Utilizan estos peluches, entre ellos Cruces, Basurto y la Clínica Universitaria de Navarra.