Vitoria - Hasta que no se vea el río de lava saliendo por el volcán no se ve la erupción, pese a haber estado latente tiempo antes en el magma. Esta metáfora es la que emplean los expertos en acoso escolar para referirse a este maltrato entre iguales que, de no tratarse a tiempo, puede acabar en el suicidio del menor o en graves traumas para toda su vida. “Una mujer ya mayor de edad, con hijos, a día de hoy si se encuentra con sus agresores del colegio no sabría que hacer”, ejemplificó ayer sobre las peligrosas consecuencias del bullying Cristina Marchena, autora junto con Iker de Luz, de un informe llamado Estudio sobre el acoso escolar en Vitoria-Gasteiz entre 4º de Primaria y 4º de ESO, realizado en el marco de un plan comarcal de empleo realizado en Policía Local. Y los resultados de este documento, dado a conocer en el Palacio Europa dentro de las jornadas técnicas y talleres para jóvenes para difundir el IV Plan Joven para Vitoria-Gasteiz (2017-2019), no son para nada alentadores. “Hay un aumento de los casos identificados de 2015 a 2016”, precisó Marchena. En concreto, un 25% del alumnado de Primaria (33%, según el Instituto Vasco de Evaluación e Investigación Educativa, ISEI-IVEI) y un 23% del alumnado de Secundaria (18%, según el ISEI-IVEI) sufren acoso escolar. Y casi la mitad de los estudiantes de Vitoria, un 40%, reconoce que el acoso se da en su centro.
“En todos los colegios se da algún tipo de acoso”, añadió la autora de este estudio. La razón de ello se debe a que se ha producido un aumento de los casos identificados de 2015 a 2016, “llegando incluso a duplicarse”. Llama la atención, en este sentido, como agregó Marchena, que el “doble de los casos se da en los colegios privados que en los públicos”.
Sea como fuere, los ataques suelen producirse en los elementos no formales del centro escolar: comedores, servicios, pasillos, vestuarios o patio. De hecho, una de las últimas tendencias es que los abusos salten la valla de la escuela para materializarse en la pantalla del ordenador, táblet o móvil vía redes sociales a través de insultos, fotos o vídeos vejatorios o a través de la muerte social del chat. Es decir, el peor de los aislamientos para un menor al que le expulsan de su grupo virtual. “Ignorarte, hacerte el vacío, esconderte, robarte, obligarte a hacer cosas que no quieres, como traer dinero, difundir rumores falsos sobre ti, o ponerte motes son casos de bullying o ciberbullying”, agrega la responsable.
“gran desconocimiento” En cualquier caso, los resultados de esta investigación -realizada tras las entrevistas individuales a profesionales, víctimas de acoso escolar y grupos de discusión- reflejan un “gran desconocimiento” de la existencia del protocolo de actuación que el Gobierno Vasco puso en marcha en 2014. “Para mejorar su conocimiento, se hizo un resumen para profesores y padres para entenderlo”, detalló Marchena. Los propios profesores tampoco saben dónde acudir cuando se enfrentan al bullying. “Se sienten poco respaldados por sus compañeros e, incluso, por la dirección, pero existe el Berritzegune (centro de orientación pedagógica). Se sienten solos y al final no hacen cosas”, argumenta esta experta, quien, como precisó, “hay muchos miedos por parte de ciertos colegios a hablar del tema. Un centro nos cerró las puertas cuando supimos que había una víctima de acoso escolar”. Es por ello que una de las conclusiones de su estudio es “la necesidad de personal cualificado ante el acoso escolar”.
A nivel teórico los alumnos saben definir qué es el bullying, “pero en el día a día les cuesta diferenciarlo y lo ven más como bromas”. Por ello, “pasa mucho tiempo desde que se detecta el caso, sobre todo, si es de tipo leve, hasta que se actúa. Una media de dos meses es el tiempo que el niño sigue sufriendo acoso hasta que se actúa”.
El informe revela que hay mucho miedo por parte del alumnado a ser “valientes” y denunciar el acoso escolar (ni de forma anónima). “¿Para ser el siguiente y que se metan conmigo?”, se preguntan los menores, quienes, además, no quieren que les llamen “chivato”.
En muchos colegios les han dicho que la solución ante el acoso escolar es la expulsión o abrir expediente, “pero ésa no debe ser. Hay que trabajar con todos los agentes implicados. Es muy importante una mayor colaboración. Todos a una: Policía, AMPA y Berritzegune”, concluye Marchena.
Ataques por internet Las familias también reciben prevención, “pero no es la suficiente”. De hecho, la siguiente jornada técnica de ayer, la de Maltrato entre iguales. Virtual y real, a cargo del profesor Jesús Prieto Mendaza, dejó claro que muchos padres tienen “un concepto trasnochado de violencia”. En los casos de ciberbullying, los progenitores lo niegan con “pero mi niño no le ha tocado”, cuando el ataque, a pesar de ser virtual, produce un intenso daño en sus víctimas, “un sufrimiento que resulta ser dolorosamente real”, subraya Prieto. De hecho, “ahora hay más casos de ciberbullying en Primaria que en Secundaria, cuando hace once años el acoso se daba en Bachiller”. Lo llamativo es que “muchos menores desconocen que subir fotos de alguien menor es un delito y se sorprenden cuando son perseguidos a nivel legal”.
Para concienciar de estos peligros, hace cuatro años que la Policía Local de Vitoria da charlas a unos 1.300 escolares por curso para que entiendan los riesgos del sexting (envío de contenido erótico lanzado voluntariamente en la red), grooming (predador sexual que se hace pasar por un menor para captar menores para obtener sus fotos) o ciberbullying. “Desde Policía Local trasladamos el mensaje de que no hay que dejar pasar ni una. Una medida sencilla es que se pongan al lado de las víctimas, aunque sea en silencio”, recalca Kepa Solla, portavoz de la guardia urbana de Vitoria.
Estudio sobre acoso escolar en Vitoria. Ayer en el Palacio Europa se presentaron las conclusiones del ‘Estudio sobre el acoso escolar en Vitoria-Gasteiz entre 4º de Primaria y 4º de la ESO’, realizado por Cristina Marchena e Iker de Luz en el marco de un plan comarcal de empleo realizado en Policía Local. Sus conclusiones inciden en la necesidad de personal cualificado en acoso escolar y mayor cooperación entre Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (AMPA), Policía Local y Berritzegune.
Maltrato entre iguales. La ponencia, a cargo del profesor Jesús Prieto, subraya que las medidas de prevención son la mejor estrategia ante el acoso escolar. Para ello, ha de conjugarse tanto la correcta utilización de las redes sociales o Internet, como la educación emocional y la resolución positiva de los conflictos.
Taller de ‘youtoubers’. El Ayuntamiento de Vitoria invitó a la juventud gasteiztarra a conocer el IV Plan Joven también por la tarde en el Palacio Europa con un taller de ‘youtoubers’, de la mano de DaniiVlog, 1Dalanyo, Sirarous y Aizea Gallagher.
Mesa redonda sobre lonjas juveniles. La Policía Local, el Servicio de Prevención y Extinción de Incendios, la Oficina del Síndico y la asociación Ai Laket! hablaron por la tarde de la posibilidad de disfrutar de estos espacios de ocio con unas garantías de seguridad, convivencia con el vecindario, entre otros factores.
Marchena es una de las responsables del ‘Estudio de acoso escolar en Vitoria-Gasteiz entre 4º de Primaria y 4º de la ESO’.
Este profesor suele dar charlas a escolares para prevenir el ‘bullying’ y el ciberacoso.
Es el portavoz de la Policía Local, que cada curso da charlas de ‘bullying’ a 1.300 escolares.
