Llodio - Aunque las cifras de desempleo hablan de que Llodio logró reducir a lo largo del año pasado su tasa de paro en 120 personas, el balance de actividad de 2016 de la asociación local Nomeolvides, dedicada al reparto de alimentos básicos entre las familias locales necesitadas, no ayuda a corroborar una mejoría de índole económica en el municipio más grande de Álava, por detrás de la capital. De hecho, Nomeolvides atendió el año pasado a 1.399 personas integradas en 386 familias, frente a las 1.116 (334 familias) de 2015.
“Los datos suponen un crecimiento muy importante respecto a las cifras de años anteriores, que interpretamos como consecuencia de la precariedad en la que tienen que vivir muchas personas”, apunta uno de los portavoces de la asociación, Patxi Sánchez. La casuística, además, es muy variada, y entre los beneficiarios de la asociación no sólo hay personas desempleadas, sino también familias trabajadoras con bajos ingresos, personas con enfermedades y perceptores de ayudas sociales tanto vascos como de otras nacionalidades. “Todos pasan apuros y la ayuda que les presta la asociación, en forma de alimentos y productos básicos de higiene y limpieza, les ayudan a hacer más llevadera su situación”, matiza Sánchez.
Para realizar esta labor, Nomeolvides realizó dos recogidas a lo largo del año pasado, concretamente, los días 18 y 19 de marzo, y 30 septiembre y 1 de octubre, en las que se superaron las catorce toneladas de alimentos de gran calidad. En ambas, la asociación contó con personal voluntario de la asociación de personas con discapacidad intelectual Apdema, que “prestaron una valiosa ayuda”, así como con la colaboración altruista de otra veintena de vecinos a título individual.
Gracias a esta labor y a la solidaridad ciudadana, Nomeolvides pudo incluir leche, aceite, conservas de pescado y de verduras en todos los lotes entregados a lo largo del año, además de los productos básicos como pasta, arroz y legumbres. “En el caso de las familias con menores de edad, incluimos también chocolate y galletas”, subrayan. Los alimentos se repartieron a lo largo del año en siete entregas, a las que se añadió una octava, a primeros de enero, para distribuir juguetes exclusivamente, con “una gran aceptación”. - A.O.