vitoria - Aunque el acusado de desvalijar una nave industrial hace dos años en Llodio no compareció ayer ante los juzgados de Vitoria y se halla en paradero desconocido, el juez encargado de la causa ya ha señalado fecha definitiva para su juicio, que tendrá lugar el 19 de mayo. El hombre, de nacionalidad rumana y con antecedentes penales, se llevó todo lo que encontró en el interior del pabellón, para lo cual también robó una Nissan Pick Up propiedad de la empresa.

A las 18.00 horas del 11 de abril de 2014, el acusado se dirigió a la sede de una empresa ubicada en la calle Vitoria de Llodio y forzó la puerta de entrada peatonal. Acto seguido, preparó todo el material y las herramientas que iba a robar. Cargador de batería, soplete, boquillas, guantes, puntas de fresadora y torno, cable, tubos, porras, barras de uña... Resultaba demasiado voluminoso para llevárselo en la mano, de manera que entró en la oficina, situada en la planta baja del pabellón, y localizó las llaves de un vehículo Nissan Pick Up. Cargó todo en la parte trasera y abandonó el lugar al volante del coche robado.

A raíz de la investigación abierta por la Ertzaintza tras el atraco, una patrulla acabó localizando el vehículo siete días después en las inmediaciones de la empresa Beyena, en la localidad vizcaína de Castrejana. El autor de los hechos fue identificado y se le comunicó que debía acudir a Vitoria cuando el juzgado correspondiente le reclamara. En la vista, que debía tener lugar ayer y en la que tenían que tomar parte tres testigos, se confirmó que el acusado se encuentra en paradero desconocido, si bien el juez tratará de que las distintas policías logren localizarlo.

La Fiscalía reclama para el imputado dos años de prisión por el delito de robo con fuerza y diez meses de multa a razón de 6 euros por día por el robo de uso de un vehículo a motor. Al forzar la entrada al pabellón, el acusado provocó daños por valor de 363 euros, el vehículo que se llevó está tasado en 6.050 euros y el material sustraído está valorado en 2.087 euros. - A. Burdain