gasteiz - Al igual que el resto de los estamentos vinculados a la Administración de Justicia, la Fiscalía alavesa se halla en pleno proceso de adaptación a la era digital y, consecuentemente, a la política de papel cero que se exige desde el Gobierno central. Sus responsables asumen que la comunicación a través del papel “tiene que cambiar”, si bien lamentan la escasez de medios y los plazos de transición tan cortos que se han planteado. Al igual que ya ha sucedido con los procuradores, que desde ayer únicamente reciben comunicaciones por vía telemática, los representantes de la Fiscalía señalan que las aplicaciones informáticas no funcionan como deberían y que, a día de hoy, aún presentan múltiples deficiencias. “Se han establecido unos plazos de entrada en funcionamiento demasiado acelerados, pero estamos en esa senda y la Fiscalía está haciendo todo lo que puede”, aseguran.
A la hora de evaluar la eficacia de la plataforma JustiziaSip desarrollada para la CAV, la Fiscalía explica que la existencia de diversas -e incompatibles entre sí- herramientas digitales en el estado es consecuencia de la configuración del sistema de Poder Judicial, un entramado muy complejo. Sus portavoces se consideran “unos privilegiados con respecto al resto de comunidades” por disponer de una aplicación integrada para jueces y fiscales, algo que no existe en los territorios controlados por el Ministerio donde funciona la aplicación LexNet. “Pero eso no quiere decir que no tengamos problemas”, admiten. - A.B.