vitoria - Dos terceras partes del planeta sufrirán escasez de agua en 2025, alerta Naciones Unidas. Con un mes de febrero tan lluvioso como éste, el buen caudal del Zadorra y el pantano a rebosar se hace difícil pensar en sequías, restricciones y escasez de agua. Sin embargo, el agua sigue siendo un bien escaso que ahora más que nunca es necesario gestionar con mimo, ya que es el elemento que más se ve afectado por el cambio climático. Así lo recordó ayer la consejera vasca de Medio Ambiente, Ana Oregi, en un recorrido por el río Zadorra a su paso por Abetxuko con motivo del Día Internacional del Agua. Y a pesar de que Euskadi ofrece una “mejora creciente” de la calidad de sus aguas, aún hay que mejorar los hábitos domésticos y comportamientos de consumo y adecuar medioambientalmente los núcleos urbanos, empresas e industrias.
Durante los últimos veinte años, el consumo de agua ha descendido sensiblemente en el País Vasco. A pesar de ello, la situación de las masas de agua “no es óptima”, ya que ni siquiera la mitad de ellas llega al buen estado para este 2015. También, pese a la mejora de la calidad del agua, hoy en día el 70% de los recorridos de los ríos vascos todavía soporta una presión significativa por contaminación debida a fuentes puntuales. “En los próximos años las emisiones de gases de efecto invernadero tendrán que reducirse considerablemente para poder evitar los peores efectos del cambio climático, entre los que se cuentan los cambios en las pautas meteorológicas y la amenaza de escasez de agua en muchas partes del mundo”, alerta Oregi. No obstante, la consejera piensa que en Euskadi se vive una realidad privilegiada en materia de aguas, con un abastecimiento universal en calidad y cantidad suficiente.
encuentro de medicus mundi Y si, pese a las amenazas existentes, Euskadi vive una situación privilegiada, no ocurre lo mismo en muchos rincones del planeta, países a los que, a pesar de ser la esencia de la vida, el agua no llega, como cada año recuerda Naciones Unidas. Para sensibilizar sobre el problema, Medicus Mundi va a celebrar en Vitoria, de jueves a sábado, el primer encuentro vasco por el derecho al agua y al saneamiento. En este encuentro se darán cita personas y asociaciones de referencia en la lucha a favor del derecho al agua y al saneamiento, tanto a nivel estatal como internacional. Se abordará: el derecho humano al agua y saneamiento, los diferentes modelos de gestión, pros y contras de los mismos, el tratamiento informativo, las diferentes plataformas sociales por la defensa de la gestión pública y varias experiencias de buenas prácticas en diferentes países. Además, durante las jornadas se estrenará el diaporama Volverse agua, Perú del fotógrafo alavés Patxi Sánchez-Dehesa, que aproximará al espectador a las diferentes maneras de entender el agua como elemento vital en las culturas.
El agua es la esencia de la vida. Sin agua no hay dignidad. Con ese espíritu, y un aluvión de datos que demuestran que aún estamos lejos de que el derecho al agua potable y al saneamiento sea universal, la ONGD aprovecha la jornada de ayer para denunciar que aún existen en el mundo 2.500 millones de personas sin acceso a fuentes mejoradas de agua potable, y que 25 millones de seres humanos mueren cada año por consumir aguas contaminadas. En el caso del agua, la dignidad se puede medir, y la medida es 20. Porque veinte litros de agua son el consumo mínimo por habitante y día recomendados para las necesidades básicas: higiene, preparación de alimentos, lavado de ropa y saneamiento. Una cantidad a la que, ni de lejos, acceden millones de personas en el mundo.
Esta organización que habitualmente trabaja en la promoción de una nueva cultura del agua insta a generar políticas públicas integrales desde la perspectiva de los derechos humanos para que el abastecimiento de agua potable deje de ser una obra de beneficencia y se convierta de verdad en un derecho legal, aunque tampoco así se resuelva el peliagudo tema de financiación. Paralelamente, considera que hay un espacio que tanto instituciones como individuos tienen que proteger: la titularidad pública de las aguas, ya que sin esa titularidad pública, “la sociedad retrocedería a la Edad Media”.
medidas de ahorro en cruz roja Además de Medicus Mundi, otras asociaciones hicieron ayer hincapié en la importancia de gestionar de forma óptima un recurso escaso. Cruz Roja, por ejemplo, trabaja para disminuir la brecha social, económica y ambiental que genera la escasez del agua. La importancia del agua radica en la cantidad de servicios que presta y la relación directa que tiene con factores como la salud, economía, medio ambiente, igualdad de género, energía o crecimiento urbano. “No existe desarrollo sin salud, economía sin industrias ni educación sin una alimentación adecuada o un correcto acceso a la energía eléctrica, y para todo ello se requiere agua”, recuerda Cruz Roja. Este año, además, culmina la década del agua (2005-2015), momento de analizar si se han cumplido los compromisos adquiridos por Naciones Unidas: “Veremos entonces cómo el éxito en el cumplimiento de todas y cada una de las metas propuestas depende de un correcto acceso al agua y al saneamiento”.
En Euskadi, Cruz Roja lleva a cabo a través del voluntariado acciones de sensibilización sobre la importancia que tiene el cuidado de los recursos hídricos y difunde medidas y consejos para el ahorro de agua y energía, además de ofrecer ayudas para el pago de facturas en casos puntuales de extrema vulnerabilidad.