vitoria. Nadie duda hoy en día de que el agua es un bien escaso y caro. De hecho el Ayuntamiento acaba de aprobar una subida del 6,2% en los recibos de Amvisa del próximo año. Una medida a la que la UE empuja, pero que Vitoria respalda en su afán por reducir el consumo. No deja de sorprender por ello que en una ciudad, galardonada con el premio Green Capital 2012, cada día se vayan por el desagüe más de 250.000 litros de agua de las piscinas cubiertas de los centros cívicos. Y eso sin sumar Mendizorroza. Una situación que obliga a rellenar cada veinte días las piletas de Aldabe, Hegoalde, Iparralde, Judimendi, Ibaiondo, Lakua, Abetxuko y San Andrés. "Y para eso necesitamos nada más y nada menos que 4,4 millones de litros de agua", explica la edil de Bildu Iratxe López de Aberasturi.
Conscientes del elevado gasto que supone, la coalición abertzale trasladó ayer su preocupación al gobierno de Javier Maroto, para que pida al Gobierno Vasco que rebaje el porcentaje diario de agua que Sanidad exige que se renueve cada día -actualmente fijado en el 5%-. "Sabemos que es lo que marca la normativa, pero el decreto en el que se basa es de 2003, se ha quedado viejo, y estamos seguros de que se puede ir un paso más allá y que únicamente se obligue a refrescar el volumen de agua que sea necesario para garantizar su calidad y buen estado sanitario", apunta López de Aberasturi. "La propia Leticia Comerón -responsable del área- reconoce que la calidad del agua es buena en las piscinas de Vitoria", aclara. Además, los más de 250.000 litros de agua que cada día se van por el desagüe son muy difíciles de almacenar. Parte de este volumen se utiliza para lavar los filtros de las piscinas y en el caso de Gamarra, por ejemplo, para el riego. Por eso, la solución, según Bildu, pasa por reducir ese 5% de agua que ha de renovarse a diario.
reutilización en aquamendi Precisamente el ejecutivo de Maroto anunció ayer que Vitoria va a testar este invierno en la piscina Aquamendi de Mendizorroza un sistema de reutilización de agua consistente en el aprovechamiento para el riego automático de la instalación del agua que se cambia diariamente en la piscina, lo que "permitirá ahorrar costes". De hecho, el sistema ya se está experimentando en Gamarra.
Además, Comerón explicó que el Ayuntamiento ya trabaja en esta línea de reutilizar el agua y aprovechar mejor el calor y la energía. Un ejemplo es el sistema de ahorro energético que existe en todas las piscinas municipales y que permite calentar el agua de recambio con el calor que desprende el agua que se evacúa.
Puesto que la temperatura de esta última ronda los 27 grados, mientras la que entra está a 9 grados, el sistema permite trasvasar calor de una a otra con lo que se evita el gasto que conlleva calentar el agua entrante. "Es una solución económica, green y medioambientalmente sostenible", manifestó Comerón.
La edil también anunció en la Comisión de Servicios a la Ciudadanía celebrada ayer que en el centro cívico Ibaiondo se ha dado un paso más porque en estos momentos se instala un sistema de recuperación de calor mediante intercambio térmico con las placas solares.