- Portugal se encamina a la continuación del bloqueo en el que transita su situación política desde que octubre el Gobierno del socialista António Costa no pudo sacar adelante el proyecto de Presupuestos para este año. Los últimos sondeos colocan en un empate técnico a la izquierda y a la derecha antes de las elecciones legislativas que se celebran este domingo. “Parece que a los portugueses no les gusta la mayoría absoluta”, ironizó ayer el candidato socialista y primer ministro, al que algunas informaciones vinculan con una nueva carrera política en Bruselas si no logra salir reelegido.

El líder conservador, Rui Rio, del PSD, alcanzaría el 34,4% en intención de voto, superando por primera vez al Partido Socialista (PS) de Costa, que baja hasta el 33,8%, según los datos de una encuesta de Aximage divulgada ayer. Las formaciones de derecha sumarían el 46,8%, medio punto más que el total de los partidos de izquierda, de acuerdo con la encuesta elaborada para varios medios lusos. Costa ha caído casi cuatro puntos en intención de voto en apenas tres semanas.

El desplome de Costa es aún más dramático si se tiene en cuenta que los que fueron sus socios de Gobierno en su primer mandato (2015-2019) tampoco atraviesan un buen momento. Las dos principales formaciones de izquierda también bajan en el último sondeo. El Bloque Izquierda (BE) se deja ocho décimas hasta el 6,6% y la coalición CDU del Partido Comunista y Los Verdes cae tres décimas hasta el 4,5%. Por contra, la formación Personas, Animales y Naturaleza (PAN), que en 2019 logró 4 diputados, sube en este último sondeo hasta el 3,2 %, por lo que podría tener la llave de la gobernabilidad en Portugal.

El sondeo confirma que la ultraderecha lusa pierde fuerza. Chega sería la tercera formación más votada con el 8%, aunque eso supone un punto menos que la pasada encuesta. Los democristianos del CDS siguen en caída y obtendrían el 1,6%, mientras que Iniciativa Liberal (IL) baja casi un punto hasta el 2,8%.

La cadena CNN Portugal también ha publicado sondeos en los últimos días que ofrecen empates técnicos entre PS y PSD. En el último sondeo, divulgado el lunes, el PS alcanzaría el 35,3% frente al 31,4% del PSD liderado por Rui Rio, un economista que fue alcalde de Oporto entre 2002 y 2013.

Tras la subida del PSD en los últimos días, António Costa ha reabierto la opción de gobernar con un pacto de izquierdas con BE y CDU, al igual que ocurrió en 2015 con la denominada “geringonça”. En 2019, Costa ganó las elecciones en minoría y optó por gobernar en solitario en una legislatura que se rompió el pasado 27 de octubre, tras el rechazo al Presupuesto en el Parlamento. El Bloque Izquierda y los comunistas sumaron sus votos a los de la derecha y apenas una semana después el presidente, Marcelo Rebelo de Sousa, convocó oficialmente unas nuevas elecciones.

Costa admitió ayer que no es previsible un Gobierno con mayoría absoluta, aunque dejó claro que lo importante es “dar estabilidad a los portugueses” para evitar “crisis” de Gobierno. “Si nos dan la victoria sin mayoría absoluta, construiré soluciones”, afirmó, pero evitó adelantar si es posible un nuevo pacto a tres con la izquierda. La líder del BE, Catarina Martins, ha invitado al PS a “trabajar en una agenda de medidas y metas” para la legislatura que se avecina, un mensaje que se interpreta como una invitación a unir fuerzas de nuevo tras los comicios de este domingo.