- El conseller de Salud de la Generalitat, Josep Maria Argimon, ha explicado que la adopción de restricciones como el toque de queda se empezará a notar en una semana, pero que serán necesarias “más de dos y más de tres” para bajar la incidencia. “Del toque de queda vamos a ver algún fruto dentro de una semana, pero lógicamente, para poder bajar esta incidencia, vamos a necesitar más de una semana, de dos y de tres”, afirmó ayer Argimon en una entrevista en la Cadena Ser.

La incidencia acumulada a 14 días en Catalunya se cifró este domingo en 1.165 casos por cada 100.000 habitantes, mientras a 7 días era de 611. Si bien el confinamiento nocturno en 161 municipios catalanes -donde vive el 80 % de la población- ayudará a reducir los contactos que se dan entre jóvenes, confesó que “no se engaña” y que muchos de estos continuarán en el entorno privado.

El conseller llamó a tomar “con cautela” los datos de contagiados, que han registrado un ligera estabilización este fin de semana, especialmente en las edades más jóvenes. Actualmente, hay 307 enfermos ingresados en las UCI, que se encuentran al 30% de capacidad y 1 de cada 5 de estos pacientes tiene menos de 40 años.

Si bien ya más de 4 millones de personas tienen la doble pauta de vacunación (51,4 % de la población catalana), Argimon ha indicado que unas 160.000 podrían llegar a enfermar de forma grave por la variante delta pese a estar inmunizadas. A pesar de la elevada presión hospitalaria, el conseller ha asegurado que de momento no se plantea modificar las vacaciones de los sanitarios.