- El cierre de negocios, los ERTE, la caída de la actividad, la precariedad laboral y las limitaciones por la pandemia han hecho que muchas personas y familias que nunca se habían visto en situación de necesidad requieran ahora ayudas y prestaciones de los servicios sociales.

Un equipo de investigación conformado por cinco universidades -la UPV/EHU, de las Islas Baleares, Complutense de Madrid, Salamanca y Universidad de Zaragoza- ha publicado el segundo Informe del Monitor de Impacto de covid-19 en los Servicios Sociales, correspondiente a los últimos meses de 2020, que concluye que la crisis por la pandemia está provocando un aumento notable de las personas que requieren ayudas sociales. Además de esas familias que acuden por primera vez a los servicios sociales porque han consumido sus ahorros, la situación se ha agudizado en el colectivo habitual de personas usuarias. Entre las personas solicitantes se encuentran “muchos perfiles con contratos inestables, familias con menores a su cargo sin ningún ingreso y gente con afecciones emocionales graves como consecuencia de la pandemia”, señala el documento.