Once después de la Navidad, la escalada de contagios en Euskadi es incontestable, y cuando se concreten las infecciones por coronavirus tras todas las celebraciones festivas podría volverse "muy complicada". Por ello, la comisión técnica del Plan de Protección Civil (LABI) analizará hoy la evolución de la pandemia, después de que en los últimos cinco días la tasa de positividad haya subido progresivamente hasta situarse en el 7,7 %, según el último dato hecho público por el Departamento de Salud.

La estadística (muy desfavorable hasta el momento) corrobora que el repunte de casos se consolida debido al incumplimiento de las restricciones y las nuevas cepas detectadas. Sin embargo, fuentes de Lehendakaritza señalan que la celebración de esta comisión técnica, que se reúne periódicamente, "no presupone obligatoriamente" que vaya a recomendar cambios en las medidas restrictivas vigentes para frenar los contagios. De momento, en Euskadi las restricciones actuales se mantienen hasta el próximo lunes día 11, aunque podrían revisarse antes, si se detecta un empeoramiento notable. Y es que es ese día cuando se reúne el consejo asesor del LABI, el órgano que decide las medidas a implementar, y que preside el lehendakari, Iñigo Urkullu.

En las últimas horas, los contagios por coronavirus aumentaron en Euskadi de 302 a 370, lo que supone 68 infecciones más, y la tasa de positividad se acerca ya peligrosamente al 8%, al situarse el sábado en el 7,7%, cuatro décimas más que el viernes, y subiendo por quinto día consecutivo. La evolución de la pandemia corroboraría las consecuencias nefastas del efecto Navidad. Pedro Gullón, miembro de la Sociedad Española de Epidemiología (SEE), ya advirtió de que las fiestas navideñas presentaban un gran riesgo, "al actuar con un efecto multiplicador". "Tienen más riesgo que el verano porque es un corto periodo de tiempo, con una movilidad altísima y contactos con personas que no hemos visto en los últimos meses".

Así las cosas, el temor a un empeoramiento de la curva epidemiológica cobra cada vez más fuerza ya que los contagios han vuelto a crecer en Bizkaia hasta los 152 (33 más) y en Gipuzkoa, que es donde se ha registrado un mayor incremento, con 43 casos más, hasta situarse en 138. Solo han bajado en Araba, donde se han registrado 72, ocho menos. Los hospitalizados en planta también han aumentado en cinco, de 23 a 28, y hay dos nuevos ingresos en UCI, pasando de 77 a 79.

Se trata, no obstante, de dos semanas, muy difíciles de analizar ya que coinciden con cuatros festivos , en los que baja considerablemnte la capacidad de rastreo, ya sea porque hay menos profesionales haciendo los test y también menos personas que se someten a las pruebas.

La situación in crescendo que atraviesa la pandemia en Euskadi no es excepcional. Las infracciones de las reuniones sociales en Navidad han obligado a muchos países a prorrogar las restricciones existentes o a aplicar más limitaciones. También en el Estado español, algunos comunidades han decidido blindarse. Más de medio millón de madrileños sufren nuevas restricciones y en Catalunya, el virus está descontrolado. Allí, Clara Prats, investigadora del centro universitario de biocomputación de Barcelona, ha pedido a los ciudadanos que se apliquen una cuarentena desde Reyes y hasta el regreso el día 11 de enero de los niños a las escuelas para evitar una explosión de la pandemia.

Sin embargo, de momento, en Euskadi no está previsto que se ajusten las medidas en vigor. En este sentido, Bingen Zupiria declaró la pasada semana que las restricciones "son muy severas y una invitación a que la ciudadanía pase con mucho cuidado estas fiestas". No obstante, precisó que la tendencia "puede cambiar en cuatro o cinco días y es lo que enseñan los meses anteriores".

Como ya anunciara el propio lehendakari antes del último LABI celebrado el día 22, "el cumplimiento de las normas también determinará el regreso con normalidad al trabajo tras el parón navideño, que el curso escolar se pueda completar y que sea posible participar con seguridad en actividades sociales, culturales y deportivas ". Urkullu, abogó por continuar analizando la situación día a día sin modificar las últimas medidas.

17.000

En estos diez meses, casi 17.000 vascos han tenido que ser ingresadas por cuadros severos. Y a falta de contabilizar los fallecidos entre los pasados 28 y 31 de diciembre, el Departamento de Salud comunicó un total de 3.031 decesos desde que comenzó la pandemia en marzo.

300 al mes

La media es de 300 fallecimientos al mes, aunque ha habido unos meses con mayor incidencia. Por ejemplo, en marzo hubo 502 muertes y en abril, 1.048. Los números bajaron entre junio y agosto para volver a repuntar después, con más de 200 muertos en septiembre y octubre, y más de 400 en noviembre y diciembre, con la segunda ola.

Un 6% más

El balance de fallecidos podría ser superior dadas las cifras proporcionadas por el Eustat y el Instituto Nacional de Estadística (INE) referidas a los primeros meses de pandemia. Según el Eustat, en el primer semestre se contabilizaron 1.720 muertes en Euskadi por covid, mientras que el dato de Osakidetza hasta el 30 de junio era de 1.615.

Pruebas masivas. A dos días de cerrar 2020, Osakidetza había llevado a cabo un total de 1.679.879 PCR y 132.538 test de antígenos, que había realizado a 1.081.578 vascos.

119.000

Desde los dos primeros casos detectados el 28 de febrero y hasta los datos notificados ayer, en Euskadi se ha diagnosticado a cerca de 119.000 vascos con coronavirus.