Vitoria.- El uso de mascarillas será obligatorio en Euskadi a partir de primero de Primaria (6 años) y habrá un comienzo escalonado y presencial de los cursos: el 7 de septiembre arrancarán las clases en Infantil, Primaria y primero y segundo de la ESO, y el 15 de septiembre en tercero y cuarto de la ESO y Bachillerato.

La FP comenzará el 14 de septiembre y cada centro educativo contará con una persona responsable para abordar aspectos relacionados con la covid-19. Además el Departamento de Educación prevé la contratación "adicional y excepcional" de 1.000 profesores para reforzar el servicio en aquellos centros con mayor número de alunmos por aula, aunque primero se analizarán las necesidades de cada colegio.

La consejera de Educación en funciones, Cristina Uriarte, ha comparecido en rueda de prensa este viernes tras participar en la reunión del consejo asesor del Plan de Protección Civil de Euskadi para detallar las medidas diseñadas por su Departamento para garantizar una vuelta segura a las aulas en la educación no universitaria. "El objetivo es impulsar un comienzo de curso presencial en todos los niveles educativos", ha descrito.

Este protocolo ha sido anunciado un día después de que el Gobierno central y las comunidades autónomas acordaran 29 medidas y 5 recomendaciones de cara al curso 2020-21 entre ellas la obligatoriedad de la mascarilla a partir de los 6 años y las clases presenciales al menos hasta segundo de la ESO.

Euskadi se abstuvo ante ese documento argumentando que la competencia de Educación está transferida y que estaba trabajando en un plan propio con medidas que podrían "coincidir" con esas 29, como el uso de las mascarillas, y otras que podrían ser matizadas.

Respecto a las mascarillas, en Euskadi serán obligatorias para los alumnos a partir de Primaria con independencia de que si hay o no distancia de seguridad de 1,5 metros, mientras que en Infantil no será obligatoria pero sí recomendable. Los profesores deberán utilizarla siempre.

Uriarte ha indicado que en Infantil la prevención se enfocará a través de los grupos estables de convivencia intentado que no se mezclen con alumnos de otras clases.

Ha explicado que se ha programado una vuelta escalonada para dar más margen a las escuelas y facilitar un mayor control. En Euskadi el calendario escolar contemplaba para este curso un comienzo generalizado el 7 de septiembre y aproximadamente el 75 % de los centros educativos iban a arrancar en esa fecha.

Ahora se ha fijado que Infantil, Primaria y primero y segundo de la ESO empiecen el 7 y que el día 15 lo hagan el segundo ciclo de la ESO y Bachillerato.

Respecto a la FP se ha diseñado un arranque más escalonado a partir del 14 de septiembre debido a la necesidad de organizar las prácticas y los talleres.

Sobre la contratación de nuevos profesores, Uriarte ha indicado que su Departamento ha previsto que pueden ser necesarios 1.000 para reforzar los colegios con un mayor número de alumnos por aula, pero que antes habrá que estudiar las necesidades de cada centro.

La consejera ha añadido que Euskadi es la comunidad con menor número de alumnos por profesor: "No llegamos a 10 por profesor", ha dicho, al tiempo que ha asegurado que no se han centrado en cuántos alumnos por aula debe haber sino en que estos estén seguros.

El sindicato mayoritario entre el profesorado en Euskadi, Steilas, ha cifrado en cinco o seis mil las contrataciones necesarias para reforzar las plantillas de los centros educativos públicos para iniciar el curso lectivo con garantías sanitarias y ha reclamado bajada de ratios.

Respecto al servicio de comedor, Uriarte ha asegurado que en los ciclos con horario continuado dependerá del centro si lo oferta o no, pero en aquellos con horario partido se mantendrá como hasta ahora.

También ha aclarado que en Infantil y en Primaria no se contempla implantar un horario continuado por dos motivos: llevan desde marzo sin ir a clase y hay que favorecer la conciliación familiar.

En cuanto al transporte escolar, el protocolo recomienda que el alumnado tenga asientos fijos en el autobús y lleve la mascarilla en todo momento.

Sobre cómo actuar cuando se detecte un caso en el centro, Educación ha previsto que cada colegio cuente con una Organización Sanitaria Integrada de referencia y un responsable para abordar los aspectos relacionados con la covid que se encargará de la coordinación con el Departamento de Salud.

Uriarte ha reconocido que puede haber un mayor absentismo y que habrá que estar vigilante porque los niños por ley tienen la obligatoriedad de ir a clase. "Haremos cumplir la ley", ha resumido.

Por su parte, la consejera de Salud en funciones, Nekane Murga, ha precisado que se considerará brote cuando haya tres casos pero que no se ha fijado un número de contagios parar determinar el cierre de un colegio, sino que habrá que analizar caso por caso y establecer el vínculo epidemiológico. Ha reconocido que si hay riesgo se tomarán "decisiones más incisivas".

Educación ha informado además de que se aumentará la limpieza en baños y superficies expuestas y de que cada mes se enviará los colegios 500.000 mascarillas y 5.000 litros de gel hidroalcohólico. Antes del inicio del curso habrá un primer envío de 800.000 mascarillas y 10.000 botes de gel. También se volverá a hacer un nuevo reparto de termómetros digitales.

Uriarte ha anunciado que se articularán ayudas para los centros concertados para que estos puedan afrontar el gasto derivado de las medidas que se van a tener que aplicar para garantizar la seguridad.

El protocolo presentado este viernes, que ya ha sido remitido a los diferentes agentes educativos y centros escolares, complementa a los elaborados en junio y julio por el Departamento de Educación.