BRUSELAS. "¿El nuevo tiempo es enviar 600 guardias civiles para controlar una jornada que ha sido siempre tranquila y llena de convivencia?", dijo Puigdemont una en rueda de prensa.
El expresidente insistió en que las ofertas de diálogo de Sánchez no se "concretan" y que de lo que él quiere dialogar "es sobre lo que pide la sociedad catalana, que es el derecho a decidir su futuro".
Puigdemont consideró haber "dado todas las oportunidades y la confianza" para que Sánchez diga cuál es su receta, "si es la receta Rajoy 2.0 o es otra receta que incluso podríamos estar dispuestos a considerar, pero es que sobre la mesa no hay nada".
Carles Puigdemont compareció junto al consejero de Administraciones Publicas Jordi Puigneró para informar sobre la demanda del expresident y de varios trabajadores cesados por la aplicación del artículo 155.
Preguntado sobre si no está "agarrándose" al pasado con las demandas sobre los efectos del 155 en vez de buscar soluciones futuras, dijo que sigue habiendo "amenazas" de que se vuelva a aplicar ese artículo de la Constitución.
"Amenazas y diálogo me parece incompatible", añadió Puigdemont. "Los conflictos no se resuelven con más gasolina", apostilló.